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Sucesos Domingo 19 de noviembre, 2006, San José, Costa Rica.

“Rafa loco” tenía 3 semanas de vivir en casa de ex compañera

“¡Dejémonos de carajadas. Sí, yo soy el que ustedes buscan!”

Hombre que lo llevaba en moto lo engañó para poder entregarlo a las autoridades

Alfonso Quesada
Keneth J. Rojas Barrantes
kerojas@aldia.co.cr

Dominical, Osa. - “¡Dejémonos de tantas carajadas y tanta preguntadera. Sí, yo soy ‘Rafa loco’, el que ustedes andan buscando!”.

Con esas palabras, Rafael Ángel Herrera Castro confesó ser el último de los ocho prófugos de La Reforma que todavía faltaba por capturar. Ya siete habían caído.

Según fuentes allegadas a la captura, Herrera comentó que tenía cerca de 22 días de estar en la zona y que una mujer que había sido su compañera sentimental hace algunos años, le dio posada.

Salía muy pocas veces, y cuando lo hacía usaba ropa que despistara a los vecinos. Tenía claro que caería en cualquier momento y que no huiría toda su vida.

Hace apenas unos pocos días, “Rafa loco” salió a una pulpería cerca de su escondite, para comprar cigarros. Cuando los pagaba, observó a dos oficiales que entraron al negocio, pero que, después de hacer unas compras, no lograron reconocerlo.

Mientras tanto, en todo el pueblo se hacía cada vez más grande el rumor sobre su presencia ahí.

Los dueños de los hoteles y negocios de la zona reforzaron la seguridad, por el temor a ser atacados por Herrera, quien había sido condenado a 45 años de prisión por varios delitos como violación, robo, asalto y lesiones graves.

Incluso, ante los rumores, muchos turistas desistían de visitar las playas. El temor era general.

Compañero lo delató

“Rafa loco” fue detenido anteayer en el puesto policial de Barú, en su primer día como peón en una empresa local. Un compañero nuevo, identificado solo con el nombre de Gerardo, de 36 años, lo llevaba a cobrar un dinero que supuestamente le debía una mujer.

La detención no fue obra de la casualidad, ya que ese “nuevo” colega alertó a las autoridades que en su moto iba el sospechoso.

El error de Herrera fue confiar en Gerardo, quien, en el momento de ir a su casa a recoger un casco, dio aviso a la Fuerza Pública.

El trayecto no exigía parar por el puesto de control. Cuando iban en carretera, el conductor hizo creer a Herrera que compraría una manzanas en una verdulería, ubicada al frente de la casetilla de la policía. En ese momento “Rafa loco” supo que, finalmente, volvería a estar tras las rejas.

Paso a paso

9 de octubre

Luego de matar a un oficial de seguridad penitenciario, ocho reos se escapan de La Reforma.

22 de octubre

Roberto Clark es detenido en Limón centro. En el arresto, golpea a un policía con una botella.

24 de octubre

Detienen en Guácimo a Johel Araya, Alberto Martínez y Johnny Rodríguez. Murió Freddy García.

26 de octubre

Víctor Urbina Molina se entrega en la subdelegación del OIJ, en Tres Ríos, Cartago.

4 de noviembre

Las autoridades capturan a Douglas Quirós Happer, en un rancho, en el Carmen de Cartago.

17 de noviembre

Rafael Ángel Herrera , “Rafa loco”, es detenido en un puesto policial en Barú, Dominical.

Así lo veo

Carlos Rodríguez, Fuerza Pública

Se hizo un trabajo de inteligencia con la colaboración de una persona que en forma valiente nos alertó y ayudó”.

Paulino Marín, Vecino

Todos los vecinos estábamos seguros de que el famoso ‘Rafa loco’ estaba escondido en algún sector de la zona”.

“Así fue como lo engañé”

Gerardo (de espaldas) relató la historia.
Alfonso Quesada

“El hombre (Herrera) llegó el jueves a pedir trabajo. El dueño de la finca le dijo que necesitaba un peón, que se presentara el viernes.

Ese día, cuando llegué a trabajar, a las 6 a.m., me encontré con él. Lo saludé de largo, y me dijo que se llamaba Daniel.

Decidí preguntarle de dónde venía. Me contestó que había trabajado en un cerro cercano, lo que me confundió. Comencé a sospechar que me estaba mintiendo, ya que conozco muy bien esta zona. Cuando terminamos de conversar, él me dijo que tenía que ir a Dominical, donde una señora que le debía plata por unos trabajos que había realizado. Le ofrecí llevarlo.

De camino, lo dejé en una entrada, porque yo necesitaba ir a la casa por otro casco. Cuando yo iba solo en la moto me llené de muchas dudas. Le pedí el celular a un vecino y alerté a la policía. Me puse de acuerdo con un oficial. Yo le encendería las luces de la moto unos metros antes de llegar al puesto, para que pudieran identificarme.

Para pasar por el puesto sin que Herrera sospechara, le dije que iba a comprar unas manzanas.

Conforme nos acercábamos al puesto, me ponía más nervioso, pero por dentro estaba tranquilo, porque sabía que allí estaban los policías esperándonos. Por fin nos detuvieron. Nos pidieron los documentos, y él sacó una cédula vieja, sin foto. Apenas alcancé a leer el nombre: Antonio.

Los policías le dijeron que debía quedarse con ellos para corroborar los datos. ‘Rafa’ me entregó el casco y unos lentes oscuros que llevaba. Le dije que más tarde volvería por él. Siempre sospeché que era el fugado”.

Herrera fue detenido en el puesto de Barú, en Dominical. Ayer fue llevado a las celdas de La Reforma.
Alfonso Quesada