La otra faceta del técnico del Saprissa

Feliz en el hogar

Más allá del fútbol, Jeaustin antepone todo por estar al lado de su familia

Aunque hizo todos los trámites para ingresar a la universidad y ser un ingeniero químico el destino le tendría otra historia.

Jeaustin Gerardo Campos Madrid, hoy entrenador del Saprissa, también nos reveló que no le gusta la remolacha y come pocos vegetales, aunque le fascina la comida italiana.

En una charla más informal Jeaustin habló de su familia, sus gustos y defectos.

“Desde niño, en Moravia, donde crecí, siempre fui tranquilo, quizás hasta un poco tímido y esa es mi personalidad hoy en día pues cambié poco”, Campos.

“En la escuela fui muy aplicado, pero en la adolescencia fui un poco más irresponsable por mi pasión con el fútbol”.

Con la madurez que dan los años Jeaustin prefiere hoy la tranquilidad del hogar para compartir con sus seres queridos y así olvidarse del balompié.

“Trato de estar el mayor tiempo con mi familia. Soy de salir a algún café con mi esposa Ariana y mis hijos Jeaustin y Miranda, para relajarnos y conversar”.

“A mí esposa me gusta dedicarle unas tres noches a la semana, en las que vamos a bailar, a escuchar música en vivo, pues me gusta mantener esa unión como marido y padre de familia”.

Atrás quedaron aquellos días en Pérez Zeledón, su primera experiencia fuera del hogar, donde con 19 años se marchó a buscar fortuna en el balompié.

“Era como un puerto sin mar. Allí habían muchas distracciones y mujeres preciosas, por lo que había que pararse duro para no caer en la tentación”.

Jeaustin hoy se retrata como un defensor de la música en español, sin importar el género, así como seguidor del teatro y las películas infantiles, las cuales no se pierde en compañía de sus hijos.