“Una chavala casi me besa”

Marcela Negrini, modelo de ropa íntima, nos cuenta cuándo fue su primera vez y lo más atrevido que ha hecho con su novio

Cada curva de la figura de Marcela Negrini se formó sudando la gota gorda. Tres sesiones de gimnasio a la semana la tienen hecha ¡todo un mango!

Así se definió ella: “Como un mango, bien durito y que dan ganas de comérselo”.

Ahora, la modelo de ropa íntima pasará por las preguntas de la Contracara. Nosotros ponemos la sal, ella el picante, y ustedes prueben a el sabor de esta fruta cosechada en Orotina.

¿Tiene novio?

Sí, tengo dos años con él.

¿Cómo le gustan los hombres, mayores o menores?

Mayores, dos o tres años más que yo. Es que tuve un novio menor y no me resultó.

¿Qué piensa su familia de que modele ropa íntima en los bares?

Ellos lo ven como un trabajo; por ahora es mi fuente de ingresos. No hay problema.

¿Es totalmente natural?

Sí, totalmente. Por si pensaban que tenía algo falso en mi cuerpo, les aclaro que soy como una fruta, natural.

¿Qué piensa del sexo antes del matrimonio?

Creo que uno tiene sexo cuando sabe que es el momento indicado. A veces la gente se equivoca. Cada uno es responsable de sus actos.

¿Cuánto gana una modelo por noche?

Depende. Un día las ganancias pueden ser ¢50 mil, pero otro ¢150 mil, según el evento.

¿Qué es lo más atrevido que ha hecho?

Ir a un “night club”. Mi novio me llevó una vez. También fueron varias compañeras por curiosidad.

¿Lo tiene todo?

(Suspira) No, me hace falta mi mamá, a quien perdí hace 14 años.

La noche de brujas, ¿de qué se disfrazará?

Mmmm, de policía. Para imponer respeto y orden (se ríe con malicia).

Su primera vez fue...

Cuando tenía 19.

¿Alguna vez una mujer le ha “echado los perros”?

¡Huy sí, vieras! Me ven muy sexy. Una chavala casi me da un beso una vez que fui a un carnaval en San José. En otra ocasión, me tiraron besos, me sacaron la lengua y me dijeron piropos. Me sentí muy incómoda.