De frente

“Chuik, chuik” ¡Cuidado nenas!

¿Cuál cree usted que es la principal virtud del VJ Campos? Conozca al seductor del “Show de la Media Docena”

Su particular estilo para “presentar videos” y el poco dominio que tiene de la geografía, lo han convertido en uno de los personajes más queridos de la televisión nacional.

Pícaro, serio y bastante juega’e vivo, hacen que él mismo se defina como “la sensualidad hecha Vj”.

Es el Vj Campos, el de la Media Docena, quien contestó las inquietudes de sus fans (o al menos eso dijo), para esta Contracara. Cuídense mujeres, porque amenazó con hacerles “Chuik- chuik”.

¿Tiene novia?

No, sería muy cruel para todas las demás... (Se da cuenta de que metió la mata).

¿Se siente mejor desde que dejó de llamarse Didier Jacinto?

Eso era cuando fui “Dj” en el programa de radio “Pregúntele al que sabe”. Ahora que pasé a tele, soy “Vj”, de Vryan Jacinto. Me gusta así.

¿Por qué se cree guapo?

Yo no me creo, lo soy.

¿Cuál piensa que es su principal virtud?

La generosidad. Darle al público la oportunidad de verme por la tevé y a las nenas el gusto de hacer kilómetros de fila para llegar a mí, y así poder evaluarlas sentimentalmente.

¿Alguien le ha pedido alguna vez un autógrafo?

Sí, un tal Julio Sabala en una entrevista que me hizo.

¿Qué opina del TLC?

Todo Lo Conozco.

¿Equipo preferido?

El femenino de cualquier disciplina (cierra el ojo).

¿Dónde compró su “carabina del amor” y en dónde se reabastece?

La carabina no se compra, se nace con ella. Y las municiones solo se consiguen cuando uno es una fuente inagotable de sensualidad.

¿Posaría desnudo?

Tendría que pensarlo. Aunque admito que sería egoísta de mi parte privar a la humanidad de tanta belleza.

Hay un “Dj” en una emisora juvenil que habla como usted. Entonces, ¿quién imita a quién?

No sé a cuál radio te refieres, pero yo soy único.

¿Alguna chica le ha quebrado el corazón?

Todo lo contrario. Así que si vas a intentar acercarte, por favor te pido que no te ilusiones y estés consciente de que puedo hacer añicos tu músculo del amor. ¡Crack!