Desde mi espejo

Ejemplar marcha de protesta

Sí, fue ejemplar. Muy pocos países en este convulsionado mundo en que vivimos, pueden vanagloriarse de ello.

Constantemente, la televisión nos castiga con imágenes de extrema violencia durante las innumerables y casi cotidianas marchas de protesta, sea cual sea el lugar y lo que las motive. Heridos, muertos y destrucción son el resultado de la mayoría de esas marchas.

Y lo absurdo es que muchísimas de las personas que se suman a este tipo de acciones, lo hacen para participar en un acto donde la violencia (que genera más violencia) les da la oportunidad de agredir, de atacar y de destruir, cuando lo cierto es que ni siquiera conocen la razón de la protesta.

El pasado 26 de febrero, circularon por la prensa y los noticieros de televisión internacionales las imágenes de la concentración que se llevó a cabo en San José y otras ciudades de Costa Rica, a raíz de una protesta popular en contra del Tratado de Libre Comercio.

Estemos de acuerdo, o no, con el TLC, lo cierto es que, una vez más, Costa Rica demostró que se puede hacer marchas de protesta sin violencia ni vandalismo, dentro de un marco de civismo, respeto y tolerancia.

Sí, verdaderamente fue una marcha de protesta ejemplar, y esperemos que en otros órdenes de la vida nacional haya más sucesos de esta índole para que estemos aún más orgullosos de esta nuestra bendita tierra.