Liga fue un chaparrón para Carmelita

Le llovió al “Chunche”

La Liga demostró que sí sabe jugar a la ofensiva y cerró muchas bocas

Santa Bárbara de Heredia. ¿Quién dijo que la Liga no juega a la ofensiva?

¿Alguien quería saber si solo se aplica en defensa?

Pregúntenle a los jugadores de Carmelita, o al “Chunche”, quien no se había acomodado en el banquillo y debió tragar grueso al ver como la Liga se iba arriba 1 por 0.

A los dos minutos, Roy Myrie abrió el marcador y el “Chunche” movió los colochos, en clara señal de preocupación, reflejo de que todo lo planeado en la semana, todo lo pensado y proyectado, empezó a hacerse añicos.

El “Chunche” le gritaba a sus jugadores, giraba instrucciones, pero los manudos no los dejaron reaccionar, no les dieron tiempo para el respiro y cayó el segundo tanto.

Apenas se jugaba el minuto 25 y la Liga ganaba 2 a 0, y eso que no es un equipo ofensivo.

Bueno, al menos eso afirmaron muchos la semana anterior, pero con su accionar, los rojinegros cerraron bocas.

Y para quien no está muy convencido de que la Liga sabe cómo atacar, entonces que le vuelvan a preguntar al “Chunche”, quien esta vez no movió los colochos, sino que frunció el ceño y lamentó con un grito, ver el tercer tanto de los alajuelenses y eso que solo se habían jugado 40 minutos de partido.

La Liga le embarrialó la cancha a Carmelita, que ingresó al campo con su mejor carta de presentación, venía de cuatro victorias seguidas.

Pero los verdolagas se toparon a un equipo picado, herido en su amor propio, por aquello que dijeron algunos de que la Liga no juega a la ofensiva.

“Este equipo tiene algo que también demostró en el segundo tiempo, cuando estuvimos con diez hombres: es ordenado”, manifestó Carlos Restrepo, técnico del plantel rojinegro.

Y hay que darle la razón al colombiano, porque su equipo supo cuidar la ventaja, tuvo variantes en el desarrollo del encuentro cuando pasó de línea de tres, a línea de cuatro y supo contener las arremetidas de Carmelita y asustarlo con contragolpes con sentido, que por falta de precisión, no terminaron en la red.

Al cuadro carmelo le llovió con la Liga, el aguacero que cayó en el segundo tiempo, fue como un pelo de gato, con el chaparrón manudo. Con su accionar, con la idea de ir a buscar el gol, la Liga despejó las dudas, luce orden, acoplada a un sistema y empezando a jugar de nuevo como un grande.

Pero si alguien tiene dudas, que le pregunte al “Chunche”, a quien no le quedó otra que reconocer la derrota.

“Felicidades”, le dijo Mauricio Montero al final del compromiso a Wardy Alfaro, quien le dio un fuerte abrazo y entre risas le contestó: “pensé que no te podía saludar, como venías de cuatro victorias seguidas”. A su estilo, el “Chunche” soltó la carcajada.