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 Sucesos Viernes 12 de octubre, 2007, San José, Costa Rica.
   

En Escazú y San Francisco de Dos Ríos

Balearon a discapacitada para robarle el carro

En menos de 20 minutos, ingeniero y mesera fueron víctimas del hampa

Carlos Láscarez

Colaboró Rodolfo Martin

Escazú. - Seis años y ocho meses después de que una bala perdida le partió la médula y dejó sus piernas inmóviles, Heidy Arias Ovares, de 27 años, volvió a sufrir, antenoche, otro drama.

La joven fue herida de bala en la boca por un joven que, junto con tres cómplices, trataron de robarle el carro.

El ataque ocurrió cuando Arias se dirigía a su casa en Escazú, alrededor de las 9 p.m., luego de comer pizza con una amiga.

En el camino, al menos cuatro jóvenes– dos a cada lado del vehículo– que al parecer iban drogados, le impidieron el paso.

Espiral de violencia

Según la Fuerza Pública de Escazú, por semana, en promedio, se registran entre 4 y 5 intentos de bajonazo y robos de vehículos en la zona.

“El timo fue que uno de ellos cruzó la calle, por lo que tuve que bajar la velocidad. Solo vi que eran jóvenes, de estatura pequeña y viajaban a pie”, contó Arias.

Los sospechosos intentaron bajar los vidrios del carro de Arias, pero, al no lograrlo, le dispararon en la cara desde muy corta distancia, afirmó.

Herida y en su afán por sobrevivir, escapó del sitio a bordo de su vehículo Kia Carens, el cual le había regalado, hace tres años, un grupo de ayuda con el fin de que no pagara tanto dinero en taxis.

Escapó a tiempo

Al momento de escapar golpeó levemente a uno de los asaltantes que, según ella, estaban decididos a todo por su vehículo.

El disparo ingresó por el lado superior de la boca y se le alojó debajo, en medio de los labios. Ni los dientes ni los huesos resultados afectados.

“Ellos querían dispararme en la cabeza. Si he sobrevivido a dos balas, es porque Dios tiene cosas buenas para mí”, relató.

Arias fue trasladada en condición delicada por la Cruz Roja de Escazú al hospital San Juan de Dios, donde fue dada de alta horas después, informaron en ese centro médico.

La víctima afirmó sentirse indignada con la actuación de la policía, ya que su caso fue archivado años atrás.

Foto Flotante: 1758583
El sospechoso, de apellido Rojas, salió hace tres meses de prisión. Sigue delicado.
Allen Campos

Agente evitó robo de carro

Casi a la misma hora en que Arias vivía momentos dramáticos, un ingeniero civil, de apellido Barboza y de 47 años, fue lanzado al suelo y encañonado por tres asaltantes, que pretendían robarle su Toyota Four Runner.

Barboza acababa de salir del restaurante Fresas en San Francisco de Dos Ríos cuando fue interceptado por los ladrones.

Una unidad del OIJ que pasaba cerca del lugar se percató de lo que ocurría y logró frustrar el robo, luego de un intercambio de balas con los asaltantes.

Foto Flotante: 1758582
Delgado tiene 8 años de ser agente judicial.
Allen Campos

En ese enfrentamiento resultaron heridos un sospechoso de apellido Rojas, de 24 años, y el agente Alexánder Delgado, de 39 años de edad y 8 de experiencia.

El primero recibió un balazo en el abdomen, el cual lo mantiene delicado en el hospital, mientras que el segundo fue impactado en un glúteo.

Según Adaptación Social, Rojas salió de prisión el 28 de julio anterior, donde estuvo tres años por homicidio calificado y robo agravado.

El antisocial portaba chaleco antibalas, un arma 9 milímetros y un “escáner”, con el que, se cree, escuchaban a la policía.

Los otros integrantes de la banda escaparon en un Nissan Sentra, hacia Torremolinos.

Ejemplo de superación

Foto Flotante: 1758579
Heidy practica baloncesto en La Sabana.
Archivo

La vida de esta estudiante de periodismo, mesera y entrenadora de empleados del restaurante TGIF, en Escazú, cambió un dos de febrero del 2001, cuando, con un grupo de amigos, se dirigía hacia una discoteca.

Esa noche, en el momento en que un amigo iba a pagar el servicio, una bala nueve milímetros atravesó el asiento del taxi y le partió en dos la medula espinal, pero eso no la detuvo.

Tras permanecer 10 días en cama, logró recuperarse. Además de estudiar y trabajar, la joven practica el baloncesto y levanta pesas.

Foto: 1758574
El día que Heidy Arias estrenó su vehículo, estaba muy emocionada. Para robárselo, le dispararon en la boca.
Archivo

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