San José Costa Rica. Edición del 02/septiembre/2007. Ir a Al Día
   

Maricruz Leiva, Periodista y Presentadora

La gritona de la “tele”

La critican, la quieren o la odian pero eso sí... todos la conocen

Gabriela Solano

Es simpática, risueña y muy gritona. Maricruz Leiva se ha convertido con el pasar de los años en una de las figuras más conocidas de la televisión nacional. Unos la aman, otros la odian y no faltan quienes la critiquen.

Pero su estilo es más que el rostro con el que toma el micrófono. Ella es así de nacimiento.

Aunque para muchos su trabajo es etiquetado de “poco serio” todo depende con el lente que se mire: “Para mí la seriedad es tomarse las cosas muy responsablemente y hacer todo con pasión”.

“Maricruz Leiva es ante todo una madre y esposa... muy feliz porque tengo un tesoro invaluable que es mi familia”

“La niñez fue la época más feliz de mi vida y nunca olvidaré cuando iba a Guanacaste a pasar unas vacaciones con mis primas y tíos. Son momentos que jamás volverán pero que atesoro en mi corazón”

De chiquitilla

De chiquitilla: Era igual de “bombeta” que ahora. Era malísima estudiante pero excelente alumna, le gustaba leer y debatir con los “profes”. Aunque esté mal que lo diga solía escaparse y asegura que pasó la adolescencia con bien porque Dios es muy grande. Pocos son los momentos tristes que tiene archivados en su memoria, el más difícil quizás –cuenta– fue la separación de sus padres.

Es esa misma pasión arraigada en el corazón la que no la deja desfallecer en el camino, aunque admite que han llegado a su mente algunos chispazos por dejar la farándula.

Su compromiso con el trabajo va más allá de aparecer cada jueves en la pantalla.

Maricruz trabaja de lunes a lunes y a cualquier hora en la que se necesite su cámara.

La cuota de sacrificio la han pagado principalmente sus hijos y su esposo, a quienes tuvo que meter en su horario hace siete años.

“Cuando empecé en ‘7 Estrellas’ mis hijos eran bebés y tenía que dejarlos mucho tiempo solos. Pero todo sacrificio tiene límites y lo más importante es darnos cuenta de eso. La familia siempre debe ser lo primero, por eso hoy sacrifico cosas mías antes que el tiempo para ellos”, afirma Maricruz.

Cómo encuentra tiempo para todo es un misterio, porque también debe dedicarle esfuerzo a la empresa de relaciones públicas en la que es socia y a su pronto regreso al dial.

Pero ¿por qué tiene tantos empleos? En su caso y en el de cientos de costarricenses la respuesta es sencilla: “Porque la vida es muy cara”.

El tema del peso tampoco es ajeno a la periodista, quien con su llegada a la “tele” descubrió lo cruel que esta puede ser con aquellos personajes que no cumplen con la delgadez para verse bien ante ella.

“En mi caso ha sido vacilón porque la gente siempre piensa que soy gorda y cuando me conocen quedan en ‘shock’ porque no se imaginan que soy delgada”, cuenta la presentadora.

Al principio este pequeño detalle la mortificó tanto que hizo una dieta rigurosa, la cual la hacía lucir bien en pantalla pero como enferma en persona.

Al final tomó la decisión correcta: Dejar de pensar en lo que la gente dice, pero admite que hace cinco años se sometió a una lipoescultura en la cintura (reducir centímetros).

En el futuro no descarta otra cirugía pero sería solo para levantar y reducir su pecho.

En casita

En la vida familiar Maricruz se define como una mamá normal. Hace su tarea con los niños, atiende a Fernando (su marido), al perro, al gato y a sus amigos también.

Los domingos se “faja” en las tareas del hogar, aunque no le divierten mucho. Le agrada más cocinar y ver televisión.

Su familia es su gran tesoro y a sus hijos trata todos los días de inculcarles los valores que recibió de sus padres.

“Creer en Dios y amarlo sobre todas las cosas. Que la familia es lo primero y que si querés comer tenés que trabajar”, recuerda emocionada Maricruz.

La popular presentadora admite que aunque está feliz con su parejita de hijos le habría gustado tener otro más.

Para ella, su esposo Fernando es verdaderamente el amor de su vida. Comparten travesuras, viajes y todo lo que sea necesario para que la llama del amor siga encendida.

“Una vez le dije que yo no iba a dejarlo por nada del mundo, pero sobre todo por mis hijos. Entonces él me miró y me dijo que quería que yo nunca lo dejara pero no por los chiquitos, sino por él”, contó riendo.

Muchos son los sueños que aún le quedan pendientes a la “gritona” de la televisión.

El principal y más importante es sin duda ver crecer con bien a sus hijos, y que ella y su esposo lleguen a viejitos, pero juntitos.

Opina que...

Foto Flotante: 1703054

Si se ganara un $1 millón: pagaría sus deudas, le compraría una casa a sus hermanas y el resto lo regalaría a quien lo ocupe

Vicios: El chocolate

Su primer beso: fue en primer año con un chiquillo llamado Ricardo

Su juguete favorito: unos patines

Le teme: a perder su tesoro (su familia)

Si no fuera periodista: sería cantante o bailarina

Foto: 1701326
Fotos Alexánder Otárola / Maquillaje Andrés Sanabría

Foto: 1701324

Foto: 1709163

Foto: 1709162