Su defensor dice que Burgos la sometió a intimidación

Zulay no habló por miedo

Ataca a Dall’Anese y fiscales por usar a su antojo declaración de ella

Amparado en la declaración de Zulay Rojas, su defensor Gonzalo Castellón aseguró ayer que ella sintió miedo al presenciar el gesto de estrangulación que Luis Fernando Burgos, supuestamente, hizo la noche del 11 de julio del 2006, cuando le confesó haber matado a Maureen Hidalgo.

Castellón alegó durante sus conclusiones que ese gesto, más una serie de llamadas telefónicas y visitas que Burgos le hizo a Zulay los días siguientes, “tendieron un cerco de intimidación” para que Rojas no lo denunciara.

El abogado pidió la absolutoria de Rojas en medio de constantes críticas y ataques por la supuesta influencia del fiscal general Francisco Dall’Anese, en la redacción de las conclusiones contra su defendida.

El martes, la Fiscalía pidió seis años de prisión contra Rojas al considerar que supuestamente guardó silencio sobre el crimen de Hidalgo y ayudó a Burgos a deshacerse del cuerpo.

Cuestiona a fiscales

El defensor de Zulay consideró que los fiscales Miguel Abarca y Cristian Ulate tomaron la declaración de ella para sacar elementos contra Burgos, pero no dieron por ciertos aquellos que podían exonerarla de los hechos que se le acusan.

“El día 17 de setiembre, Abarca le cree a Zulay su versión y se refiere a ella como la testigo, pero ayer (martes) Ulate desautoriza a su compañero y expresa que Zulay dijo verdades a medias”, comentó Castellón.

“Usó a Zulay”

Castellón dijo no tener interés en que Burgos sea condenado o no, pero afirmó que está claro que él se dedicó a sembrar dudas, coartadas, elementos falsos y que utilizó a Zulay para este fin.

Manifestó que tras la presunta confesión del homicidio de su esposa, Burgos cambió su relato al día siguiente y le dijo a Zulay que Maureen estaba desaparecida y que sus planes para festejar el aniversario de bodas seguían en pie.

“¿Cuál era el propósito de don Luis Fernando? Crearle confusión o amedrentarla”, indicó.