Hugo Solano
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San José. - Dos hombres, uno de ellos menor de edad, fueron detenidos ayer por su presunta participación en el asesinato del estudiante Josué Rojas Morales, en la urbanización Santa Mónica, en Tibás.

El principal sospechoso, de apellido González y de 18 años, labora en un taller de bicicletas. Fue capturado en su casa, ubicada 300 al este y 25 norte del salón parroquial de Tibás.

El otro detenido es un adolescente de 14 años, conocido como “Gallito”, quien cayó en la casa de una tía en San Sebastián.

Al parecer, “Gallito” conocía a Josué pues, según explicó la madre del estudiante, Roxana Rojas, en algunas ocasiones escuchó a su hijo hablar de un sujeto al que le decían así.

Rojas manifestó que le causó escalofríos enterarse de que este menor de edad estuvo en la vela de Josué.

Josué llegaba a la casa del colegio, a eso de las 2:30 p.m., cuando dos hombres le dispararon para robarle el bulto y el teléfono celular. Rojas falleció horas después en el hospital Calderón Guardia.

Allanamientos

Los operativos comenzaron ayer a las 10:30 a.m., a cargo de la Sección de Homicidios y la Sección Penal Juvenil.

En los inmuebles allanados se decomisaron tres armas de fuego, ocho puñales, una mata de marihuana y una bicicleta cuyas características coinciden con la descripción que hicieron los testigos de la utilizada por uno de los implicados en el asalto.

El celular y el bulto robados al joven estudiante siguen sin aparecer y, según una fuente ligada al caso, el asalto ha perdido fuerza como móvil del crimen, ya que ambos detenidos cuentan con recursos económicos.

Todos los homicidios son diferentes, pero este es un caso “sui géneris” en el que los homicidas conocían a la víctima y vivían relativamente cerca, dijo la fuente.

La captura de los dos sospechosos se efectuó con información aportada por vecinos que escucharon la detonación y, después, vieron a los sujetos escapar por el precario Triángulo de Solidaridad.

Se llevaron a cabo cuatro allanamientos simultáneos: uno en San Sebastián, otro en el taller de bicicletas y dos en las viviendas donde cayeron los detenidos.

Con antecedentes

El Ministerio de Justicia informó ayer que González estuvo dos meses en la cárcel de San Sebastián por robo agravado.

Entró el 25 de junio y salió el 28 de agosto pasados, cuando llegó la orden de excarcelación, emitida por el Juzgado Penal de San José.

Las autoridades se mantuvieron tres horas en la vivienda de González.

Vecinos, amigos y familiares esperaban el desenlace que culminó con la captura y el decomiso de evidencias, entre ellas una señal de Tránsito.

La madre del joven asesinado dijo estar muy agradecida con los medios de comunicación, así como con los oficiales que allanaron las viviendas y dieron con los sospechosos de matar a su hijo.

Los detenidos quedaron en el Ministerio Público a la espera de medidas.

“Siento paz aunque no esté mi hijo”

Eso expresó Roxana Rojas, madre de Josué, cuando se enteró de la captura de dos sospechosos del crimen de su hijo.

“Estoy contenta porque, al sacar dos delincuentes de circulación, evitamos la muerte de muchos muchachos que ya no podrán ser asaltados como Josué.

“Lo que me preocupa ahora es que en este país la ley es muy suave con los menores de edad y por esto seguiré de cerca las medidas que les dicten.

“Si tienen agallas para matar, deben tenerlas para enfrentar la justicia”, dijo.