Franklin Arroyo González
farroyo@aldia.co.cr

No mirarlos a los ojos, ni mostrar miedo y hablarles con firmeza, son algunos de los consejos que los expertos recomiendan para enfrentar el ataque de un perro, pero reconocen que es poco lo que se puede hacer.

Si ya está siendo atacado, quédese en posición fetal, no corra, ni lo enfrente porque las posibildades de salir airoso son escasas.

Esos son parte de consejos que ofrecieron los expertos Lillian Schnog, presidenta de la Asociación Humanitaria para la Protección Animal de Costa Rica; Mary Carmen Marín, especialista en comportamiento de perros, y el veterinario Luis Castillo.

“Hay que procurar quedarse quieto y estar tranquilo. No gritar, los perros huelen el miedo y es peor”, dijo Schnog.

Marín expresa que correr es una buena idea, siempre y cuando considere que le dará tiempo de llegar a protegerse, sino, mejor no intentarlo.

“Eso les incentiva el instinto depredador que tienen. Por eso, los perros persiguen las motos, los gatos, todo lo que se mueva”.

Castillo agrega que un golpe en la nariz podría confundirlos.

“Eso hace uno cuando los va a examinar, pero lógicamente, es mucho más difícil en un ataque más severo”.

Orlando Fallas fue atacado el jueves 29 de mayo por dos perros de la raza “american stanford” y sobrevivió. “Cuidé que no me atacaran el cuello”, relató el hombre, quien permaneció 30 minutos bajo el asedio de los canes.

El 11 de noviembre del 2005, el nicaragüense Natividad Canda murió, luego de ser atacado en una propiedad privada, por dos perros rottweiler.

También es poco lo que pueden hacer las personas que son testigos de un ataque. Tirarles agua, o disparar al agua podría funcionar, pero no siempre, consideran los expertos. “Si es un perro mediano que ataca, agárrelo de las patas traseras y levántelas. Así soltará a la víctima ”, dijo Marín.

A las heridas no se les debe echar nada

Carlos Chavarría, jefe de socorrismo de la Cruz Roja de San José, dijo que a las heridas provocadas por un perro no se les debe echar nada hasta que llegue la asistencia. “Se puede hacer un control del sangrado en la herida, con una presión directa con un trapo limpio y seco. Lo ideal sería con gasas. Pero no le eche yodo, ni alcohol, ni nada”, expresó.

Recomendó que si está en la mira del perro, se quede quieto, sin perderle la mirada, pero sin verlo a los ojos y procurar alejarse despacio.

“Si ya es atacado, hay que mantener la calma. Sé que es difícil. Y cubrirse las partes vitales y estarse quieto”. Dijo que atienden unas 15 emergencias por mes por ataque de animales en todo el país.