Isabele Sánchez, Miss Teen Internacional 2008

Muñecota paulista

Haciendo gala a su nombre, el de toda una reina, esta guapa brasileña voló ocho horas hasta llegar al país para conquistar la quinta corona personal, acercándose a su sueño de niña

Isabele Sánchez, una encantadora joven de 18 años, vino a Costa Rica para recordarnos a esas preciosidades que aparecen con frecuencia en las telenovelas brasileñas.

Proveniente de Mataõ, un pequeño pueblo perteneciente al estado de São Paulo, esta “menina” (jovencita en su lengua natal, el portugués) venció a 15 beldades en el concurso Miss Teen Internacional, el sábado antepasado y se llevó para su país la corona que obtuvo en el teatro Melico Salazar.

Con un acento que le endulza el oído a cualquiera, la hermosa rubia conversó con VIP sobre su victoria, que le deparó su quinta corona personal y la primera fuera de Brasil.

¿Qué sabor le deja alcanzar este título?

Esta corona significa un paso para mi objetivo de vida, porque desde pequeña tengo el sueño de ser “miss”. Comenzando por el Miss Teen, ya esto es un paso para más adelante aspirar a un Miss Brasil. También es muy importante porque desde ya tengo la responsabilidad de representar a los adolescentes.

¿Esta fue su primera visita a nuestro país?

Sí, la primera vez, y viajé sola. Nunca había viajado sola entonces estaba con un poco de miedo, ansiosa de conocer a las chicas, el ambiente. Tenía un poco de inseguridad, pero ya cuando llegué lo superé.

¿Qué cualidades cree que le dieron el triunfo?

Desde que llegué a Costa Rica yo preferí ser yo misma, no fantasear o aparentar ser quien no soy. Enseñando siempre un buen corazón, siendo simpática con las chicas, haciendo amistades, hablando con todo el mundo en el hotel que me recibieron muy bien. Creo que todo eso ayudo a ganar el título.

Nos contaron que ha ganado otros concursos, ¿cuáles fueron?

Sí, todos en mi país. Gané el Tic Tac Mega Model regional, el Garota Coc Brasil, el Model of the World 2007 y el Miss Teen Brasil 2008. También participé en el Miss Brasil Mundo en setiembre pasado. Allí quedé en el sétimo lugar. Me llamaron para tener una mayor experiencia y así prepararme y competir para en éste.

Podríamos decir que es una “cazacoronas”...

Sí, claro y quiero muchas más. Pienso continuar cazando (risas).

A usted se le unió después un asesor que viajó desde Brasil, ¿cuéntenos la importancia de tener este tipo de apoyo?

Veo muy importante tener una asesoría. Yo, por ejemplo, una semana antes de salir a Costa Rica me fui con él, Gerson Antonelli (quien es director nacional del Miss Teen Brasil) a ver vestidos, accesorios y collares para usar aquí. Traje unos 20 vestidos para no repetir ninguno. Es importante tener una persona con experiencia para que te de ese apoyo, esa confianza, que te enseña como comportarse durante las entrevistas, en una pasarela. Debo parte de mi victoria a él.

Al inicio el idioma fue una barrera, ¿cómo logró superar ese punto?

Cuando llegué no sabía nada, pero después con la convivencia con las chicas, lo fui absorbiendo. Ahora me hablan más rápido y entiendo un poquito más, pero antes era ¡horrible! No conseguía entender nada.

¿Es cierto que la molestaron con una palabra?

(Se sonroja) Sí, en Brasil, la banda se dice “faixa”, y eso aquí suena como cuando alguien se viste mal (arruga la cara). Todo el mundo me miraba extraño porque decía que andaba “faixa”.

¿Qué tienen las brasileñas que destacan tanto?

Las brasileras somos muy animadas, extrovertidas. Hacemos amistades muy fácil. Cuando llega un extranjero a nuestro país lo recibimos con los brazos abiertos.

¿Es fiestera?

Sí, soy muy fiestera. Los fines de semana no paro en la casa. Es muy común hacer churrascos en las casas de los amigos, y vamos rotando cada día.

¿Qué tal para la samba?

¡Buenísima! La samba es una tradición en mi país y es como obligación que todas las brasileñas sepan “sambar”. Es algo que traemos en los pies. Cuando llegué aquí, las chicas querían aprender a bailar. Intenté enseñarles pero ¡uf! nada, no lo conseguí.

De su estadía en Costa Rica, ¿qué le gustó y qué no?

Las playas, aquí me sentí como en Brasil. Adoro tomar el sol, broncearme. También nos llevaron a un bosque en Coronado y eso demostró la preservación que tienen acá. Y claro el pueblo, la gente, que me recibió bastante bien, eso me fascinó. ¿Qué no me gustó? No sé, una picada de hormiga (risas).

En casa

Aunque regresó desde el pasado lunes a su hogar, Isabele prometió visitarnos pronto, aunque será para venir de vacaciones con su familia.

Como sacada de una telenovela, esta reina juvenil se llevó la corona y más de un corazón hasta la tierra de la samba.