Barcelona / EFE. Frank Rijkaard, que dirigirá hoy ante el Mallorca su último partido como entrenador del Barça en el Camp Nou, se despidió sin rencor.

Aunque el presidente Joan Laporta lo señaló como el responsable de la situación deportiva, el holandés no quiso entrar en polémica y dijo que había sido “un gran honor”, dirigir al Barça.

Para Rijkaard, su salida se da por “los mecanismos del fútbol”.

En todo momento, el holandés asumió su responsabilidad en el éxito y en el fracaso y no tuvo ni un sólo reproche para sus jugadores; asegura que no le han dolido las formas en su despedida, y recalcó que lo que realmente le importa son “las cosas bonitas”.

Cuando se le preguntó por las declaraciones de Laporta, en las que veladamente culpó a Rijkaard de los resultados negativos cosechados en los últimos dos años, Rijkaard ha afirmado que no es de los que culpa a nadie.

“Asumo mi responsabilidad y eso es una cosa natural. Se habla mucho del presidente, pero él no puede marcar goles”, dijo.

El holandés también tuvo palabras de agradecimiento para sus jugadores. “Cada uno siempre ha querido lo mejor para el club, para sí mismo y sus compañeros”. Además se refirió a la gente que conoció en Barcelona y “nunca la podré olvidar.

“Quiero agradecer los momentos vividos, no sólo los éxitos, sino todos”. El entrenador no tiene planes sobre su futuro. En cuanto a Guardiola, su sustituto, dijo: “Lo respeto mucho. Puede hacer un gran trabajo, es un hombre de la casa”, concluyó.

La fecha

Hoy Jornada 37

Zaragoza - Real Madrid

Betis - Sevilla

Valladolid - Getafe

Almería - Recreativo

Villarreal - Espanyol

Levante - Valencia

Barcelona - Mallorca

Osasuna - Murcia

Athletic Bilbao - Racing Santander

Atlético Madrid - Deportivo La Coruña