Lunes 10 de noviembre de 2008, San José, Costa Rica
Nacionales | Pido la palabra
Pasito a pasito

Ana Coralia Fernández, periodista
paradigma@racsa.co.cr

De enero a mediados de octubre pasa cerrado. El taller remata la calle antes de seguir a Coronado por el lado Moravia allá por donde quedaba Indica.

En los últimos días del décimo mes, empieza el milagro. Unas figuras blancas a punta de pincel, darán a sus futuros dueños ilusiones de casita propia, navidades en familia y tamales.

Cuando se acerca diciembre, la pequeña fábrica de pasitos navideños permanece abierta hasta altas horas de la noche. Desde la calle veo camellos, chivitos, reyes y pastores y sagradas familias, esperando su mano de pintura para dar color y calor a los portales, que representan un deseo muy antiguo de que el Niño Jesús, nazca de nuevo (y ojalá nunca se vaya) del seno de nuestro hogar.

Las figuras hacen fila, pacientes y calladas, como nosotros los ticos, esperando a que un pincel les dibuje una sonrisa o una señal de adoración. Antes de eso, solo son maquetas de yeso o de cerámica hechas en serie. Poco a poco se vuelven únicas en el color del manto, del cabello, en la túnica del casto José o en el lujoso atuendo del rey mago del lejano Oriente.

¿Será así que nos hicieron a nosotros? ¿Que alguna mano poderosa nos pintó la risa y nos dio aliento de vida? ¡Quién lo sabrá! Al fin y al cabo, esa misma mano creadora también nos dio la libertad de creer lo que queramos. Lo cierto es que, pasito a pasito, en aquel taller y en la vida, lo vamos intentando con alegría porque un Niño nació para alivianarnos la cruz para siempre.

Publicidad
Publicidad
Recomienda esta página a un amig@
Recomienda esta página a un amigo

© 2008. Periódico Al Día. El contenido de aldia.cr no puede ser reproducido, transmitido ni distribuido total o parcialmente sin la autorización previa y por escrito del Periódico Al Día. Si usted necesita mayor información o brindar recomendaciones, escriba a webmaster@aldia.co.cr.