Hugo Solano
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San José. Ayer a las 5 a.m. un guarda privado de apellidos Osorio Andrade caminaba hacia su trabajo en unos condominios cuando, al parecer, dos tipos en moto intentaron asaltarlo, por lo que al defenderse mató a uno e hirió a otro a punta de bala.

Osorio subía una cuesta, 25 metros al este de la ferretería Santa Bárbara, en bajo Los Anonos, Escazú, cuando se topó con dos sujetos quienes, según narró Osorio a los oficiales del OIJ, le tiraron la moto encima e intentaron despojarlo del arma, por lo que tuvo que disparar.

En el sitio quedó la moto marca Kinetic tirada en el piso y en ella, sin vida, el conductor Roberto Calvo Porras, de 42 años.

El hombre que lo acompañaba, escapó herido en un brazo, por lo que las autoridades alertaron a los hospitales por si llegaba a pedir asistencia por sus propios medios.

El fallecido presentaba un disparo en el cuello y cuando la Cruz Roja llegó, lo declaró sin vida en el lugar.

Se trata de un vecino del Bajo Los Anonos, sector que, según el jefe policial Álvaro Marín Fernández, presenta serios problemas por robos, asaltos y consumo de drogas.

El guarda que iba a ser asaltado tiene 45 años y en su declaración dijo al OIJ que actuó en defensa propia.

Toma de pruebas

Ante la jueza y la fiscal se le tomó la declaración, luego se le taparon las manos con bolsas de papel para hacerle las pruebas de residuos de pólvora y posteriormente se le dejó en libertad, mientras se investiga el caso.

El nicaragüense solo presentaba golpes en la cintura y una pierna, producto del golpe con la motocicleta.

Una vecina, solo identificada con el apellido Barboza, dijo que escuchó los disparos y luego vió inconsciente en el piso a Roberto Calvo, quien vivía al otro lado del puente del Tiribí.

Oficiales de la sección de homicidios y de recolección de indicios del OIJ decomisaron la moto y buscaron casquillos en la vía pública.

El cuerpo fue levantado a las 8:10 a.m. por orden de la jueza de turno, María Gabriela Zúñiga.