Ileana Vargas

El habitual maquillaje oscuro que caracteriza a la cantante de Le pop, Stella Peralta disimula el brillo de su vivaz personalidad y recuerda su pasión, el rock.

En la actualidad, Peralta tiene toda su energía direccionada a que Le Pop alcance éxito internacional, mientras aprovecha la posibilidad de disfrutar plenamente de una vida más relajada.

Sin embargo, durante años el amor que siente por la música se convirtió en sinónimo de largas jornadas de intenso trabajo.

“Laborar en las disqueras significó mucha demanda de tiempo. Eso hizo que sacrificara muchas horas de estar junto a mi hija”, recordó la artista quien trabajó en mercadeo y como gerente.

Las notas musicales la golpearon desde temprana edad y aunque la madre de la joven cuenta como anécdota que su hija nació cantando, fue a los 13 años que Peralta tomó sus clases iniciales de canto.

Su primera profesora fue la talentosa y ya desaparecida, Mary Peck y hace algunos meses tuvo como maestro a Gourgen Mkrtytchian.

Aunque la treintañera cuenta que la educación musical que recibió a edad temprana le permitió mejorar la técnica vocal, reconoce que su camino también está marcado por la herencia .

“Mi abuelo materno tocaba violín y la mandolina. Recuerdo que desde muy pequeña mi mamá me cantaba “El toro y la luna”, y esas tonadas son como las primeras que registró mi cabeza”, detalló.

Las invitaciones para acompañar a amigos músicos en el escenario comenzaron a ser cada vez más frecuentes y eso hizo que el nombre de Stella Peralta empezará a tomar fuerza en el ámbito nacional.

En ese entonces, era común encontrarse en bares a la cantante junto a otros rockeros interpretando canciones de las bandas AC/DC, Led Zeppelin bajo el nombre de “Stella y los Teletubbies”.

Pero sin lugar a duda, el salto definitivo para alcanzar su sueño lo dio con su integración a Le Pop.

En crecimiento

La tranquilidad que goza en este momento le permitió enfocarse en su crecimiento personal y artístico.

Tras pasar por un divorcio hace 11 años, Peralta cuenta que esto le facilitó volverse más independiente.

“Cuando nos separamos mi hija estaba muy pequeña y sentí mayor responsabilidad de trabajar para tener una estabilidad económica que me proporcionara lo necesario a mi hija”, relató

A pesar de esa fallida experiencia, la cantante no se dejó vencer y desde hace un año su corazón palpita por un nuevo amor.

Aunque hace unos meses se anunciaron que las campanas de boda sonaban para ella y su pareja, el guitarrista de Gandhi, Federico Miranda, la cantante desmintió los rumores sobre un compromiso oficial.

“Estamos muy felices con el noviazgo pero aún no estamos comprometidos. Solo hablamos de las cosas que cualquier pareja que está feliz desea para el futuro” manifestó.

Otra de las cosas que hizo madurar a Peralta, es la responsabilidad de educar a su hija adolescente, María Cristina, de 14 años.

“De repente, enfrentarme a que ya es una adolescente ha sido un poco difícil. Pero soy afortunada por que ella es muy inteligente”, contó la joven madre quien no paraba en halagos para María Cristina.

Los cambios que está viviendo le recuerdan su propia experiencia juvenil.

“Ella es bastante parecida a mi. Me recuerda lo mucho que me gustaba salir con mis amigos, por eso la comprendo mucho”, dijo.

Peralta, se confiesa ser una mamá muy comprensiva y apuntada con los amigos de su hija. Sin embargo, le da el espacio necesario, para que su primogénita viva la magia que tiene la adolescencia.

“Cuando la llevo junto a sus amigos al cine me hacen bromas o gritan en el centro comercial: “Ella es Stella, la de Le Pop” o me piden en el carro que cantemos todos juntos Califotoman” narró entre risas.

El éxito que está alcanzado Le Pop, hacen de Stella una mujer con más convicción.

“Estar en el grupo fue un cambio muy grande, sobre todo el último año que hemos recibido tantas buenas noticias, como los premios y las nominaciones en medios internacionales” manifestó.

La cantante confesó que una vez que dejó su trabajo como locutora en “El búnker” en la radio 911, para dedicarse de lleno a Le Pop, tuvo temor.

“Cuando dejé de trabajar fue un momento de reubicación y sentí un poco de miedo al decidir vivir de la música”, mencionó.

Por eso, está segura que los logros obtenidos por la banda no es cuestión de suerte, sino de tenacidad.

“Creo en el momento que está el grupo porque hemos trabajado muy fuerte para que todo esto pase”, enfatizó.

Stella también reconoce a muchas personas. “Buena parte de lo que vivimos se debe a la suerte de encontrar con gente maravillosa que nos ayudó”, sostuvo la intérprete.

A viva voz

Le encanta todos los deportes extremos que están relacionados con el agua. Pero le teme a los que involucran las alturas.

Como pasatiempos disfruta de ir al cine y leer libros de terror. Entre sus escritores favoritos están Gabriel García Márquez y Stephen King.

La soledad y los domingos sin hacer nada la ponen triste.

Su gusto por la gastronomía es bastante exigente. Trata siempre de aprender cosas nuevas para cocinar. Por eso se declara, fiel seguidora del canal de cable Food Network.

Su reciente cambio de imagen, estuvo a cargo de la estilista Lisa Cooper, la responsable de maquillar a la cantante Rihanna.