Cynthia Rodríguez, corresponsal y Carlos Láscarez S.
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Parrita - Lo que empezó como una noche de karaoke y fiesta para un hombre, terminó en tragedia la madrugada de ayer, después de que recibió una certera puñalada en el corazón.

El asesinato se registró a las 3 a.m. fuera del bar La Central en Matapalo de Quepos, en el momento en que el nicaragüense José Torres Dávila, de 20 años, pretendía regresar a su casa en compañía de varios amigos.

Como principal sospechoso de la agresión, figura un coterráneo de apellido Tremiño, de 25 años, quien fue arrestado a las 7:30 a.m., en las cercanías de un aserradero, por agentes del OIJ de Quepos.

No recordaba nada

De acuerdo con una fuente ligada al caso, las primeras palabras que comentó el hombre fueron: “¿Porqué me detienen?, yo no he hecho nada, no maté a nadie y no recuerdo lo qué pasó”.

Hace una semana, según trascendió, Tremiño fue víctima de un asalto por parte de dos hermanos que lo despojaron de su dinero y pertenencias.

Ese día, el afectado juró que se vengaría y que las cosas no se iban a quedar así.

Al parecer, la madrugada del domingo había tomado mucho y confundió a la víctima con uno de los hombres que le habían robado, por lo que sin mediar palabra se lanzó a agredir a Torres.

Agentes judiciales regresaron al sitio la mañana de ayer con el fin de obtener más datos sobre lo ocurrido y tratar de conseguir declaraciones de testigos.

De acuerdo con la versión brindada por amigos del fallecido, a éste le gustaba mucho cantar y era muy alegre. Se ganaba la vida como peón agrícola de la finca Palma Tica, donde efectuaba labores desde hace tres semanas.

No se pudo hacer nada

Byron Chaverri.

Byron Chaverri, Guarda Palma Tica

Los dos muchachos tenían unos 22 días de haber llegado a Matapalo. Llevaban poco tiempo trabajando acá”.

Juan Badilla, Capitán Fuerza Pública

Nos avisaron de una riña entre dos extranjeros. Al llegar encontramos que uno ya estaba fallecido tras recibir una puñalada”.

Leonel González, Cruzrojista

A las 3:30 a.m. declaramos al joven como fallecido. Presentaba una herida en el tórax. No había nada qué hacer por él”.