Ronny Rojas y agencia AP
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El presidente, Óscar Arias, admitió ayer, en Nueva York, que el Gobierno ha dado una señal de poca seriedad en la tramitación de las leyes de implementación del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos (TLC).

Pero destacó que si él no hubiera sido presidente, Costa Rica no habría aprobado el TLC.

“Tenía un sentimiento de culpa porque, en honor a la verdad, tenemos más de cuatro años desde que se firmó lo que se conoce como Cafta. Me parece que hemos dado una señal de poca seriedad en la tramitación de las leyes de implementación”, dijo Arias.

El mandatario confía en que la última ley del TLC, varada en la Asamblea después de que la Sala IV declaró inconstitucional el procedimiento de aprobación, sea ratificada antes del 4 de noviembre, día de las elecciones presidenciales en Estados Unidos.

“Francamente espero que sea posible realizar la enmienda ( a la ley pendiente), en octubre, porque siento cierta pena cuando me reúno con nuestros socios y les tengo que pedir una nueva extensión”, agregó Arias.

La corrección del error es el último paso para la certificación y entrada en vigor del TLC.

El plenario legislativo aún no ha recibido el asunto para su discusión.

El gobernante pidió a los demás países miembros del tratado que no se castigue a Costa Rica por no haberlo aprobado y expresó su esperanza de que el acuerdo entre en vigor dentro del plazo que se otorgó al Gobierno.

Una delegación estadounidense, encabezada por el secretario de Comercio, Carlos Gutiérrez, visitará Costa Rica el martes próximo para conocer los avances en la tramitación del TLC.

Se espera que ese día se haga oficial la prórroga que Estados Unidos y los demás firmantes del tratado le dieron a Costa Rica para aprobar la ley pendiente.

Colombia sí, Venezuela no

El presidente, Óscar Arias, evitó ayer criticar a Colombia por adquirir armas, pero cuestionó al Gobierno venezolano por hacer lo mismo.

“Con la presencia de una guerrilla, es inevitable que Colombia adquiera armas; en Venezuela es más cuestionable porque no tiene amenazas de vecinos ni de nadie” , dijo Arias en una entrevista que le concedió a la cadena de noticias CNN.

Sostuvo que las críticas contra la carrera armamentista que lanzó desde el seno de las Naciones Unidas, el miércoles anterior, iban dirigidas a “los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad que venden el 80 por ciento de las armas en el mundo”.