Antonio Alfaro
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Quién dice que pitar un clásico es fácil, mucho menos después de las críticas y sanciones que llovieron en el arbitaje.
Por si fuera poco, el elegido, Rafael Vega, nunca ha dirigido un juego entre Saprissa y la Liga. A la Comisión de Arbitraje no le preocupa; según su jerarca, Efraín Rodríguez, “ha venido haciendo un buen trabajo, calladito, sin que se hable de él”.
Y es que en las últimas jornadas, que no se hable ni bien ni mal de un réferi ya parece ganancia para los árbitros. Si no pregúntenle a los once -entre guardalíneas y centrales- que fueron inhabilitados esta semana por la Comisión de Arbitraje.
“Es para que se despierten”, señaló Rodríguez.
¿No será más presión para Rafael Vega de cara al clásico, un partido de por sí analizado con lupa por la prensa y la afición? “Eso siempre se presenta. Siempre es un partido aparte”, señala Efraín Rodríguez, quien confía en las condiciones del elegido para mañana en Tibás.
“Fue jugador (de Segunda) y eso lo ayuda. Tiene mucha personalidad, buena condición física”, señala Rodríguez. Como exárbitro sabe qué es dirigir un Saprissa-Liga y tan solo le recomendaría a Vega no precipitarse en el inicio del juego.
“En el primer clásico, puede sentirse un poco de presión en los primeros cinco minutos, pero después el árbitro empieza a meterse de lleno en el juego y se olvida de lo demás”, comenta Rodríguez.
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