Managua, Nicaragua / DPA.- El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, ordenó ayer decretar una "emergencia sanitaria" en todo el territorio nacional por un período de 60 días, ante la inminencia de que se desate un brote de gripe porcina en el país.

Ortega hizo el anuncio junto a sus principales ministros, en una presentación transmitida en cadena de radio y televisión y donde advirtió que la llegada del virus a Nicaragua "es prácticamente inevitable".

El decreto presidencial ordena al ministro de Salud, Guillermo González, "que declare emergencia sanitaria por un período de 60 días", para desarrollar las acciones necesarias de prevención y atención de una eventual epidemia.

Ortega admitió que no existen suficientes tratamientos en el país, ya que apenas hay 3.300 dosis para atender a eventuales pacientes contagiados del letal virus.

El decreto de emergencia faculta al Ministerio de Salud a adquirir bienes y servicios sin mediar los procedimientos ordinarios (licitaciones establecidas en el Ley de Contrataciones del Estado), según el texto leído por el gobernante.

El Ministerio de Salud también deberá crear un "Comité de Atención" para enfrentar un brote epidémico y a "establecer todas las medidas de control, atención y mitigación" de la enfermedad, señala el decreto.

Si bien hasta ahora no se reporta ningún caso en el país, el mandatario dijo que "hay que tomar todas las precauciones" porque "la amenaza (de epidemia) es para todo el mundo, no escapa ningún país".

"Esta es una batalla por la vida", advirtió el mandatario. "Tenemos un virus que se ha multiplicado y ya está presente en cuatro continentes", añadió.