Isaac Lobo
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Desde hace tiempo los televidentes que sintonizan el espacio “Intrusos de la Farándula” notaron un hecho que les llama la atención, que Catalina Mendieta no deja hablar a sus compañeros.

No sólo la gente en la casa, también la prensa nacional ha criticado esta situación, es por eso que Al Día decidió salir de dudas y conversar con los animadores.

“A mí me interrumpe constantemente. Voy por la mitad de una idea y Catalina se mete y no me deja terminarla. No sé si es que no escucha o más bien tiene un problema de educación”, manifestó Andrés Sanabria.

A Gabriela Gorden, la nueva del grupo, los periódicos han señalado que no la deja decir ni pío.

“A veces sí es molesto que me interrumpa, pero no lo tomo personal, esa es su personalidad. Eso sucede porque en el programa no hay un guión que indique quien habla”, asegura.

Kathryn Arbenz por su parte señala que Catalina no sólo le “atraviesa el caballo”, sino que hace bromas de mal gusto.

“Un día dijo que yo me levantaba a la 1 p.m., cuando desde las 8 a.m. estoy haciendo cosas. Pero yo no tengo ningún problema con ella”, añadió.

Johanna Ortiz es la más tolerante del grupo y comenta que esa es la labor de Mendieta.

“Ella es el hilo conductor. Lo que siento es que ahora estamos un poco desordenados al hablar”. Al Día intentó hablar con Mendieta, pero no fue posible localizarla en el celular, en su casa ni el canal. Tampoco respondió el correo electrónico que se le mandó. También tratamos de conversar sobre el tema con Gilberto Valencia, director del espacio, pero no respondió los mensajes.