Miguel Calderón Suárez
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Vladimir Lanzoni Campos, de 36 años, murió antenoche luego de recibir al menos ocho balazos en su cuerpo en plena vía pública mientras se dirigía a su casa ubicada en Hatillo 5, San José.

Según versiones del OIJ, dos sujetos motorizados pasaron a gran velocidad. Uno de ellos se bajó, le disparó a Vladimir y ambos huyeron.

Sin embargo, a escasos 200 metros una patrulla policial los observó y los persiguió. Segundos después se armó una gran balacera entre los delincuentes y los efectivos de seguridad.

Los policías hirieron a uno de los maleantes en el muslo de la pierna derecha, hombre que fue identificado con los apellidos Zúñiga Chacón, de 19 años.

El individuo fue trasladado bajo custodia policial al hospital San Juan de Dios, donde permanece con condición estable.

En la escena del crimen quedaron varios casquillos y fue decomisada un arma calibre 38, propiedad de los antisociales.

Por la manera en que ocurrió el homicidio, las autoridades presumen que se trató de un ajuste de cuentas en contra del civil.

Dejó una bebé...

Según comentaron sus familiares, Vladimir no tenía problemas con nadie y se encontraba muy feliz por la llegada al mundo de su pequeña hija Alexa de tan solo dos meses y medio.

“Era un muchacho tranquilo, por cosas del destino, horas antes de morir, Vladimir agarró su cámara y se tomó varias fotos con su hija”, recordó Nuria Lanzoni, tía del fallecido.

La víctima

Vladimir Lanzoni

Edad: 36 años

Dolidos

Nuria Lanzoni, tía.

“Era un muchacho sano, que yo sepa no tenía problemas con nadie. Quería mucho a su hija Alexa Sofía”.

Hanzell Lanzoni, primo.

“Como primo era especial. Lo recuerdo como un joven muy querido, alegre y cariñoso con su familia”.