Lázaro Malvarez
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El ridículo de De La Hoya ante Pacquiao, los papelones de los pesos completos y el empeño de algunos veteranos en dejar su vida de pensionados por un puñado de dólares forman parte del pasado; el 2009 llega con nuevos bríos para el boxeo, deporte al borde del nocaut.

La paliza al “Niño Dorado” ratificó la calidad del filipino Pacquiao, el mejor pugilista libra por libra del planeta, quien ya tiene en agenda una explosiva pelea para el 2 de mayo con el inglés Ricky Hatton.

Curiosamente, escasos días después del triunfo de “Pac-man” ante De La Hoya, Floyd Mayweather hijo, quien había anunciado su retiro seis meses atrás, dejó entrever la posibilidad de ponerse de nuevo los guantes, eso si para la que llamó una “mega-pelea” (de millones).

Mayweather, quien tiene récord de 39 triunfos sin reveses y era considerado el mejor libra por libra del mundo, guarda silencio, pero su consejero, Leonard Ellerbe, se atrevió a vaticinar una paliza para Pacquiao.

Seguro ya están pensando en la gran pelea del 2009 entre Mayweather-Pacquiao, el duelo entre el mejor púgil de todos los pesos en activo y el que regresa para recuperar su trono.

Al margen de las especulaciones, enero arranca con un combate de primer nivel entre el segundo mejor boxeador del 2008, Antonio Margarito, y el veterano de mil batallas, Shane Mosley. Ambos despidieron el año con convincentes victorias ante el puertorriqueño Miguel Cotto y el nicaragüense Ricardo Mayorga.

Para el boxeo costarricense, este podría ser el año de la consagración del invicto peso completo Carl Davis Drummond, quien tendrá su prueba de fuego el 7 de febrero en Alemania cuando se enfrente al uzbeco Chagaev.