Milton Montenegro
mimontenegro@aldia.co.cr

En el día del amor y la amistad, Saprissa le regaló un lindo arreglo de flores a sus seguidores.

Es un adorno con buen aroma, con olor a gol y muy bien elaborado con flores rojas y amarillas.

Estas fueron bien escogidas por los saprissistas, las trajeron del estadio Rosabal Cordero, donde estaban muy bien cuidadas.

El arreglo que lo empezó a armar Wálter Centeno, lo terminó Alejandro Alpízar, quien le puso el lazo con el definitivo 2 por 1.

El regalo hubiera sido más llamativo, pero Jairo Arrieta, quien desperdició varias opciones, no supo si colocar rosas o claveles.

Saprissa festejó el 14 de febrero con victoria, con un triunfo que lo llevó a compartir con Herediano el tercer lugar del Grupo B con seis puntos, aunque con los rojiamarillos no fue muy amistoso.

A los florenses, los morados le recetaron la segunda derrota del torneo, por varios momentos los hicieron lucir mal y por si fuera poco, apagaron cualquier intención de Andy Furtado por volver a sacudir las redes en Tibás.

La expectativa que había sobre Andy fue solo eso, curiosidad por ver qué hacía, cómo se desempeñaría en su primer juego vestido con los colores rojo y amarillo.

Pero tanta expectativa no es culpa de Andy, sino de la prensa que tanto habló del goleador de la Selección, goleador que lució apagado y fue sustituido a los 45 minutos. Tampoco fue culpa de Andy mostrar muy poco, sino de sus compañeros, quienes lo aislaron, no lo buscaron y lo dejaron solo luchando con la zaga morada.

“Él solo no va a resolver el partido”, dijo Paulo Wanchope antes del encuentro y tenía razón, solo no logró hacer nada, ni siquiera darle bien el pase a Marvin Angulo, cuando ambos entraban al área de los tibaseños.

Herediano golpeó primero, con gol de cabeza de Briceño, pero le faltó cabeza para manejar el juego. Se quedaron viendo como Saprissa movía la pelota, como hizo cuatro pases seguidos y Centeno terminó de empatar.

Terminaron de perder la cabeza cuando el capitán Mauricio Solís, reclamó que no cometió penal, cuando se desconcentró y lo expulsaron. Más aún, cuando al final encimaron al árbitro y reclamaron de forma airada.

¿Qué le dejó el partido?

Primero es un clásico y no podíamos pensar que pese a que el rival se quedó con un hombre menos, no nos iba a atacar. Paulo Wanchope manejó bien los hilos del compromiso.

¿Herediano fue mejor?

No estoy diciendo eso, incluso creo que en el primer tiempo, cuando Herediano tenía once jugadores, nosotros tuvimos más claro el encuentro.

¿Le agradó su equipo?

Hicimos un juego interesante, en algún momento fuimos muy verticales. Hablamos de manejar más la pelota e ir de un sector a otro. Le pedimos a Celso y a Centeno que estuvieran más en el medio, como más apoyo.

Mucho reclamo al final.

Lástima que se den los roces, no tiene razón de ser. Lo mejor que los equipos se entregaron.