Hugo Solano y Rodolfo Martín
hsolano@aldia.co.cr

Tras ocho horas de diligencias en los tribunales, el boxeador Carl Davies quedó libre ayer al retirar una mujer una acusación en su contra por supuesta violación.

Al salir en libertad, Davies dijo que tendrá que dejar el país para que no traten de pisotearlo.

Rechazó los cargos de supuesta violación que le atribuía una nicaragüense de 24 años, que trabajaba en su casa como empleada doméstica.

Añadió que todo se debe a que quieren sacar provecho económico de él, porque creen que trajo un montón de millones de la última pelea en Estados Unidos.

Marielos Solano, quien representa a la denunciante, admitió que desde el martes las partes mantenían contactos para llegar a un arreglo y reconoció que este fue un entendimiento de tipo económico.

Pero no dio detalles.

José Pablo Badilla, defensor de Davies, fue enfático al aclarar: “No se pagó un solo cinco, lo único que cancelamos fue ¢1 millón por prestaciones”.

Estaba en Parismina

A las 10:10 a.m. después de nueve días de estar desaparecido, se presentó a la sección de Delitos Sexuales del OIJ, en San José.

Aseguró que no sabía que tenía orden de captura hasta que lo leyó en los periódicos. Agregó que entrenaba en las playas de Parismina para la próxima pelea.

Quince minutos después salió esposado de las oficinas del OIJ en San José, hacia los Tribunales de Goicoechea, donde permaneció hasta las 6 p.m., cuando recobró su libertad.

Fue indagado en la Unidad de Delitos Sexuales de la Fiscalía Adjunta del Segundo Circuito Judicial de San José, porque los hechos supuestamente se dieron en Coronado.

Davies quedó libre debido a que la ofendida se presentó ante la Fiscalía a manifestar su deseo de no continuar con la denuncia. El artículo 18 del Código Procesal Penal contempla la posibilidad de que las personas mayores de edad víctimas de violación puedan quitar la denuncia.

Ante la falta de interés de la ofendida, el Ministerio Público no puede continuar con la investigación por impedimento legal.

Davies ya estuvo en la cárcel por una causa similar. Pasó casi nueve años preso en La Reforma por violación agravada, salió en el 2005. El 12 de febrero del 2008, una colombiana lo acusó de violación, pero por contradicciones de la mujer Davies quedó libre.

Denunciante se retractó

José Joaquín Ureña, defensor Davies.

Me encargué de cubrir el caso desde el punto de vista penal. Mi colega atendió conversaciones con la otra parte”.

José Pablo Badilla, defensor Davies.

La relación de hechos de la ofendida era contradictoria y eso motivó a la denunciante a retractarse y revocar la denuncia”.

Tranquila porque se llegó a un acuerdo extrajudicial, pero abatida porque su caso trascendió a los medios de comunicación, así abandonó ayer el edificio de los Tribunales de Goicoechea la joven nicaragüense que denunció al boxeador Carl Davies de presunta violación.

“Mañana mismo (hoy para los lectores) regreso a Nicaragua”, expresó la muchacha cuando caminaba al lado de su abogada Marielos Solano.

Vuelvo a mi patria –agregó– con mis padres y mis dos hijos de ocho y dos años. La joven dijo que al momento del supuesto ataque, tenía tres meses de haber llegado a Costa Rica por primera vez.

“Llegué recomendada para colocarme en esa casa. Vine para trabajar duro, ahorrar y forjarme un mejor futuro”, argumentó.

Aclaró que se relacionó directamente con “ la patrona” y “su madre”, no así con Davies, que se mostraba distante y respetuoso con ella, con excepción de la madrugada del 21 de junio cuando, al parecer, ocurrió el hecho, manifestó.

La nicaragüense comentó ayer que durante las primeras horas no sabía qué hacer porque “no tenía amigos” pero que luego se armó de valor y le expuso el caso a “la patrona”, quien la animó a plantear la denuncia, trámite que hizo al mediodía. Luego de esto ya no regresó a la casa de Davies.