Milton Montenegro
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Liberia. - Su cara lo delata, está feliz con su Liberia y por eso muestra una sonrisa enorme, de oreja a oreja.

Alain Gay Hardy, técnico de Liberia Mía, disfruta el momento y ayer antes del entrenamiento la gente lo saludaba, sus jugadores le estrechaban la mano y él devolvía el saludo como si fuera un padre orgulloso por el buen trabajo de sus hijos.

“Disfruté del triunfo junto a mi esposa, conversamos del partido y del buen momento del equipo”, dijo ayer don Alain, quien recordó que se emocionó con el recibimiento que el domingo les hizo la afición liberiana.

“Llegué tarde a la casa debido a la gran cantidad de gente en la calle. No pude dormir mucho, porque aproveché para disfrutar, lo que hicimos ante Saprissa es muy grande”.

Pero el técnico francés no se deja llevar por la euforia.

“Vamos poco a poco, tenemos humildad y poseemos jugadores que saben exactamente de dónde vienen. Aún falta, por eso le he dicho a los muchachos que debemos tener los pies en la tierra”.

Gay Hardy recordó que en su carrera ya vivió algo similar, aunque de eso ya pasaron 42 años.

“Sí, en Francia yo logré un título, gané la Copa de Francia en 1967, eso ya está un poco largo, pero fue un momento de alegría”.

El estratega destacó que la final deben encararla con tranquilidad, por eso no gasta tiempo en pensar que Saprissa apelará y algo podría suceder.

“Eso no es asunto mío, nosotros en la cancha vamos a trabajar con tranquilidad y calma. Sabemos que será un partido muy duro ante Herediano, que tiene jugadores muy fuertes también y con buenos delanteros”.

Cuando se le consultó si Liberia Mía es el favorito, Alain sonrió, pensó la respuesta, guardó silencio y después exclamó: “eliminar al campeón es un factor importante, pero no debemos olvidar que ante nosotros estará un cuadro bien preparado”.

De su boca

“No pude dormir mucho, aproveché para disfrutar, lo que hicimos ante Saprissa es muy grande”.

Alain Gay Hardy, D.T. de Liberia