Allan Andino
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Hace nueve meses decidió cambiar su rumbo e instalarse en la “Ciudad del Sol”, Miami, luego de un año y medio probando suerte en tierras aztecas.

La modelo Wendy Myrie concursó la semana pasada en Miss República Deportiva del canal Univisión. Aunque no ganó estuvo entre las finalistas.

Desde allá nos cuenta cómo le va y cuáles son sus prioridades en este momento.

¿Por qué decidió mudarse de México a Miami?

Quise probar suerte en Televisa, pero el D.F. es una ciudad muy peligrosa y hay mucha violencia. Tuve mis trabajos, fui imagen de la productora que contrataba extras para cine mexicano.

Entonces, ¿por qué se fue de México?

Como yo, hay miles de chicas que buscan oportunidades. Es un país clasista y elitista y no están acostumbrados a un tipo de mujer exótica, no encajo en lo que buscan.

¿Cuáles son sus planes ahora en Estados Unidos?

Me vine a estudiar Técnica de Ultrasonido Médica. Me va muy bien, me gradúo en marzo y me queda un año de práctica.

¿Y el modelaje?

Desde que llegué aquí no estoy cien por ciento activa. La vida útil de una modelo debería terminar luego de los 30, ya teniendo un título propio. Si te salen extras excelente, incluso ya estaba pensando en la retirada (risas). Si lo pongo en una balanza...no es mi prioridad.

¿Qué le dice a las críticas que siempre le hacen?

Cuando te dedicas a esto debes saber que te expones a eso. Soy de mente abierta, tengo 14 años en el medio y en lo del programa “Wild On!” sabía a lo que iba, pero trataron de compararlo con un escándalo “porno”. Las críticas negativas me llenan de fortaleza y me satisfacen más, me preocuparía si no hablaran de mí y pasara inadvertida.

¿Qué ha sido lo más difícil de este cambio de vida?

Que te toca empezar de cero. Sobrevivir en Estados Unidos no es fácil, he hecho cosas que nunca me imaginé, como ser bartender. Hay que sacar un curso para perfeccionarse, saberse 200 cocteles, de todo. Eso no te hace ni más ni menos, te dejan buenas propinas y es un buen trabajo.

¿Cómo se describe?

Soy una mujer de lucha. Como buena Leo me gusta que me miren, soy sencilla, llena de sueños, pícara, traviesa, un poco tortera, pero sin malicia. Soy rencorosa más no vengativa.