El brasileño del Real Madrid, Kaká, corre en una cinta antigravedad diseñada por la NASA, que permite a los jugadores correr sin resentirse de sus lesiones.

La cinta es estructuralmente como una normal, pero simula los efectos de correr sin gravedad, mediante un sistema de aumento de presión del aire desde la cintura hasta los pies.

El paciente puede reducir con esta burbuja, cerrada herméticamente, en un 80% su peso corporal. En la carrera apenas se produce impacto en las articulaciones y disminuye la resistencia.

La cinta Alter-G está por ahora al alcance de muy pocos. Su coste es superior a los ¢40 millones.

El Madrid y el Barça son los únicos clubes en España que la tienen en sus instalaciones.

La máquina trabaja para mejorar el rendimiento y la recuperación de lesiones.