Carlos Láscarez S.
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Escazú. - Desde corta distancia y de al menos ocho disparos, desconocidos asesinaron antenoche de varios balazos en el pecho y cabeza a un comerciante que ya había sobrevivido a dos atentados en abril y junio del año pasado en Desamparados y Goicoechea.

El ajuste de cuentas ocurrió a las 11:53 p.m., 400 metros al norte del restaurante Rostipollos en el residencial Trejos Montealegre en San Rafael de Escazú.

El fallecido fue identificado por la Fuerza Pública y el OIJ como Randall Sigifredo Alvarado Gutiérrez, de 32 años, quien departía con una mujer de apellido Pérez, a bordo de un BMW 316 i modelo 98.

De acuerdo con la declaración que la mujer brindó a la Policía, se les acercaron varios hombres a bordo de un Hyundai verde, quienes tras disparar escaparon.

Al parecer, los homicidas emplearon una subametralladora, afirmó una fuente ligada al caso.

Gregory Mesén, encargado de la Fuerza Pública de Escazú, afirmó ayer vía telefónica que la víctima quedó en el asiento del conductor y que el incidente les ingresó por el sistema 911, que indicaba que había un hombre herido en el lugar.

En el sitio se hallaron varios casquillos, que fueron analizados por agentes de Recolección de Indicios y de Homicidios del OIJ. El crimen, presuntamente, obedece a un ajuste de cuentas, ya que no atentaron contra la mujer, de nacionalidad nicaragüense.

Trascendió que, al parecer, la pareja regresaba de una fiesta.

Esposa fue acribillada

El 17 de abril del año anterior, en El Edén de Vista de Mar, Goicoechea, desconocidos acabaron de múltiples balazos con la vida de Angelie Amador Blanco, de 31 años, quien fuera esposa de Randall Alvarado. En esa ocasión, los asesinos le dispararon desde un vehículo en movimiento y con un arma de calibre pesado, cuando pretendía ingresar a su hogar.

El 18 de junio pasado había sido la última vez que atentaron contra Alvarado, pero éste respondió al fuego. Por ese hecho la Policía detuvo a dos sospechosos.