Yensy Aguilar Arroyo
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Según los vecinos, es la cuna de muchos milagros. La ermita de Llano Bonito de Naranjo, ubicada a 13 kilómetros del centro del cantón, se construyó hace 32 años.
Esta edificación reemplaza a la primera que se levantó y que era de madera. A causa de los fuertes vientos, se derribó y la Junta Edificadora de Llano Bonito se vio en la necesidad de construir otra, al frente de la que estuvo inicialmente.
Este templo, dedicado a San Isidro Labrador, está hecho de cemento, su piso es de terrazo y su cielorraso es de madera y tiene una imagen del patrono.
Se le han hecho pocos cambios, principalmente en lo que respecta a pintura. Ahí las misas se dan el primer y tercer domingo de cada mes y alberga a unas 100 personas.
Uno de los milagros que ha ocurrido en el templo, es la curación de una joven que tenía un tumor en un ojo. La comunidad se reunió en el templo para orar por ella y al tiempo, un médico especialista la analizó y le dijo que no tenía la enfermedad que se le diagnosticó en un principio.
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