Nueva York/DPA.- Chupan la sangre y son noticia. Aunque los vampiros están de moda en el cine, este insecto no tiene nada que ver con ellos: las chinches viven escondidas y tampoco se dejan ver en la ciudad más grande de Estados Unidos, pero su presencia se deja sentir y ya han tomado Nueva York.

De noche salen de sus escondites, sienten el calor humano y ahí comienza su labor.

El insecto hemíptero se alimenta de sangre humana y por eso se siente especialmente a gusto allí donde por la noche resulta acogedor. Y entonces taladra la piel con sus mordiscos provocando unas picaduras irritantes y desagradables.

Los insectos se han multiplicado e incluso amenazan con poblar las tiendas de Manhattan. En lo que va de mes han tenido que cerrar tres locales en pocos días.

En el barrio de SoHo, la primera que se vio afectada fue Hollister y poco después una filial de Abercrombie & Fitch. Además, hace unos días tuvo que cerrar una tienda de lencería de la cadena Victoria’s Secret donde las chinches se adueñaron.

Según el diario “Wall Street Journal”, el presidente de Abercrombie, Michael S. Jeffries, ya se ha dirigido al alcalde de la ciudad, Michael Bloomberg, para recibir instrucciones y apoyo.

La autoridades de la ciudad, sin embargo, han comunicado que los encargados de las tiendas tendrán que hacer frente a los minúsculos y dañinos animales en solitario.

Eliminar el problema resulta complejo, pues se aconseja empaquetar casi al vacío los colchones de las casas y colocarlos, si es posible, al sol, además de lavar con agua hirviendo la ropa y empaquetar las colchas y los cojines en bolsas, también al vacío.

Los parásitos a menudo se propagan por la ropa y allí donde la gente está muy junta, las chinches pueden pasar de persona a persona, por lo que, para algunos en Nueva York ya se ha convertido en una costumbre despedirse diciendo: “Good night, sleep tight. Don’t let the bedbugs bite” (Buenas noches, duerme bien y que las chinches no te piquen).