Isaac Zúñiga Keith
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Una combinación letal, al mismo estilo de un “pase de la muerte”, se está dando entre los futbolistas a nivel mundial, pero no precisamente dentro de los terrenos de juegos y cada día se pone más y más de moda.

Hablamos de la prostitución, que camina de la mano del fútbol, y que atrae como un imán a los jugadores.

El último escándalo con esos matices, es el que están viviendo los franceses Franck Ribéry del Bayern Munich, y Karim Benzema del Real Madrid, investigados por haber contratado los servicios de la joven Zahia Dehar de 18 años, cuando esta era menor de edad.

Sin embargo, éste es un caso más dentro de una larga lista, y para muestra un botón.

En el 2006 los jugadores Wagner, Francismar y Jonathan del Cruzeiro, además del defensa central Mateus del América Mineiro, fueron denunciados por tres prostitutas que exigían de los jóvenes el pago por sus servicios sexuales en una fiesta en la que participaron.

El portugués Deco en el 2007 fue “cazado” en Londres engañando a su mujer con una prostituta que cobraba 1.500 euros (casi un millón de colones) la noche.

“Se sentó en una colcha y la rubia le practicó sexo oral, para luego mantener relaciones sexuales en diferentes posturas”, dijo un cliente citado por el diario británico News of the world.

Ese mismo año, su compatriota Cristiano Ronaldo, cuando formaba parte del Manchester United contrató por un fin de semana junto con sus ex compañeros Nani y Anderson, a cinco trabajadoras del sexo que cobraban 300 dólares la hora (¢154 mil).

“Me hicieron sentir barata. Estuve con 200 clientes y nunca había sido tratada con tan poco respeto. No les importaban nuestros sentimientos, ni siquiera hablaban. Sólo movían nuestros cuerpos en la posición correcta”, contó en su momento Tyese Cunningham, una de las cinco mujeres presentes en la casa de CR ese fin de semana.

Recientemente un reportaje del programa “Fantástico”, del canal O Globo, causó estupor en el fútbol brasileño. Jugadores de la liga local organizaban orgías con prostitutas donde se consumían drogas. Incluso internacionales de la “verdeamarela” estaban involucrados, pero no se divulgaron los nombres de los mismos.

Y es que los futbolistas se han convertido en uno de los blancos de este negocio. En Chile por ejemplo crearon una agencia de damas de compañía Platinumescort, cuyos principales clientes son jugadores.

“Los futbolistas son buenos clientes porque es gente importante y que le gusta mucho pasarlo bien. Y como tienen mucho dinero prefieren nuestros servicios”, aseguró la dueña Claudia Carrasco, explicando las razones del por qué los jugadores buscan a las prostitutas.