Isaac Lobo
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La vida y las circunstancias hicieron que no vivieran juntos, pero separarlos jamás.

Los papás solteros por el amor que sienten por sus retoños, siempre buscan la manera de compartir un buen día, no sólo una vez al año.

Son cinco historias que ejemplifican lo que viven muchas familias costarricenses: la de los músicos Humberto Vargas y Luis Alonso Naranjo, la del periodista Alejandro Brokke, la de actor Pablo Rodríguez y la del presentador de VM Latino Mauricio Alvarado.

Brokke dijo que su lema es “tener calidad más que cantidad de tiempo”. “Trato de estar en los momentos más importantes de la vida de mi hija Mariel”.

Él tiene la ventaja de la tecnología, pues pasan chateando.

Para Pablo su secreto es llevarse bien con la mamá de su hija Yamila de siete años. “Aunque no tenemos una relación, ella es muy permisiva conmigo, nos ponemos bastante de acuerdo en cuanto a los tiempo de verla”, aseguró.

Ellos se la pasan viajando a la playa. “Trato de que el tiempo que estamos juntos sea sólo para ella, desconecto el teléfono y cancelo compromisos el fin de semana que estoy con ella”.

Luis Alonso debe luchar con la geografía. “Para mí es un poco difícil, pues no sólo por mi trabajo sino porque Gabriel vive en Pérez Zeledón. “Los viernes voy a la salida de la escuela y lo recojo. Así pasamos el fin de semana juntos”, explicó.

Mauricio por su lado aseguró que él es un papá muy compresivo. “Como mis hijos, Gabriel y Tamara, ya son adolescentes soy yo quien se acomoda a su agenda”.

El locutor va a todas las reuniones del colegio y cuando su hijo tiene exámenes se queda con él.

Humberto tiene un buen pretexto, su hijo es el guitarrista que lo acompaña con la guitarra eléctrica y es su sonidista.