Carlos Láscarez S.
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Cartago.- Dos ingenieros y el dueño de una constructora fueron condenados ayer a ocho años de prisión por el delito de estafa en perjuicio de 39 familias en condición de pobreza extrema, a quienes engañaron con falsas promesas de casa digna.

Los ingenieros condenados fueron Pablo Arrieta Torres y Alejandro Arrieta Torres, mientras que el otro condenado fue Róger Solano Castillo, propietario de la compañía RCO consultores.

También el Tribunal Penal de Cartago condenó a seis años de prisión a Randall Mora Cordero, ingeniero del Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS). A este último se le responsabilizó de haber recomendado lotes que supuestamente, cumplían con las condiciones aptas, así como los servicios básicos, cuando no era así.

Los condenados se aliaron para desarrollar cuatro proyectos habitacionales en La Fila del Rosario de Aserrí, los cuales fueron declarados como inhabitables y con riesgo de deslizamientos entre el año 2001 y el 2002.

Se calcula en más de ¢50 millones el monto de lo estafado.

El tribunal estuvo integrado por los jueces Tatiana García Araya, Marvin Arce Portuguez y Sergio Quesada Carranza, quienes dictaron seis meses de prisión preventiva para los condenados.

Además de las familias, se vieron afectadas la Mucap y el IMAS, ya que incurrieron en nuevos gastos para corregir las obras que estaban mal levantadas.

“Es inconcebible que ustedes se hayan aprovechado del programa que crea viviendas para la gente pobre. Es inhumano lo actuado por ustedes” explicó el juez Sergio Quesada en el por tanto.

Además, el tribunal aseveró que los sentenciados obligaron a los futuros beneficiados a firmarles un documento, donde aceptaban las condiciones y términos.

Sobre la actuación de Mora, la jueza García indicó que este omitió indicar aspectos sobre la topografía, a sabiendas de que iba a ser por medio de bonos de vivienda que se iba a construir. Entre los afectados hay hasta personas con discapacidad y adultos mayores.