Karla Barquero y Mario Guevara, colaboradores
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La ministra de Salud, María Luisa Ávila, afirmó ayer que no se aplicaría la ablación a los cinco animales de Rohrmoser, pese a la resolución publicada en La Gaceta, el pasado martes.

“A criterio de este despacho no se estaría haciendo la ablación, la Ley del 2003 riñe con los derechos de los animales por lo que será modificada”, afirmó.

Sin embargo, Ávila comentó sobre un historial de quejas de vecinos contra Nora Hernández, dueña de las mascotas.

“Revisando los antecedentes, las denuncias datan del año 2000. Se estaría realizando un allanamiento para sacar los perros y pido a la Asociación de Animales que se pronuncien”, dijo.

Según Villalobos, ella se opondrá a que se lleven sus mascotas, ya que afirma que dispone del espacio suficiente para tener los cinco. Admitió que tuvo problemas con otras mascotas que las han llevado en allanamientos en años anteriores.

Expertos consultados aseguran que para aplicar el procedimiento quirúrgico deberían verse varias aristas. “Me parece una medida demasiado drástica, no es justo para los animales, se trata de una mutilación”, comentó el veterinario Miguel Oreamuno.

“Se trata de una violación a los derechos de los animales. Depende del lado en que se mire. Por ejemplo, la castración le estaría quitando el derecho a procrear a los animales”, comentó Pedro Villalobos, veterinario.

Dentro de la casa

Al Día logró ingresar a la vivienda de Nora Hernández en donde se logró constatar que posee más de cinco mascotas.

Hernández mostró un aposento de la casa, donde conviven seis perros y varios gatos.

Pocos muebles, paredes deterioradas y un olor a desechos forman parte de la casa, que cuenta con dos pisos.

Nora sostiene que sus animales no ladran durante el día, sino que el ruido lo hacen cuando se acercan a la vivienda personas extrañas u otros perros, o cuando las mascotas están en celo.