-
Damaris Solís, hermana de Cristina lloró encima del carro fúnebre. Rafael Pacheco.
-
La salida de la iglesia estuvo cargada de sentimiento. Rafael Pacheco.
-
Hermanas y familiares cargaron el féretro dentro del cementerio de Escazú. Rafael Pacheco.
Carlos Láscarez S.
clascarez@aldia.co.cr
Comparta
Escazú.- “Haber recibido la noticia de que se trataba de los restos de mi hermana fue como ganar el “gordo” navideño para nosotros, ya que ella sabe que la amamos”, afirmó ayer Vera Solís, hermana de Cristina Solís, minutos antes de sepultarla ayer en el cementerio de Escazú.
Después, decenas de personas brindaron un aplauso como tributo a Solís, quien falleció el 4 de noviembre pasado tras ser víctima de una avalancha en calle Lajas de San Antonio, Escazú.
Vera agradeció las oraciones de las personas que siempre estuvieron al tanto de su hermana.
“Siempre hay que orar cuando alguien desaparece. Entendemos el dolor que pasa cada familia cuando alguien se pierde. Estoy orgullosa de mi princesa, a quien tuvimos por 27 años. Agradezco a mi madre por la hermana que nos dio”, dijo llorando.
Agregó que nunca van a olvidar el regalo (sobrino Sebastián) que tuvieron durante cinco años.
Minutos antes, una caravana de vehículos, allegados y familiares se dirigieron del templo católico hasta el cementerio, escoltados por dos motorizados de la Policía Municipal.
Dentro de la iglesia, el féretro sellado, siempre tuvo encima una rosa rosada y una fotografía de Cristina y de su hijo.
Los recuerdos y llantos fueron más emotivos cuando salía de la iglesia, ya que pusieron la canción “Yo te extrañaré”, del dúo Tercer Cielo.
Publicidad