Tokio, Japón/AP. - Toyota pidió ayer a los dueños de casi 1,7 millones de automóviles en todo el mundo que los lleven a revisión en taller debido a una filtración de gasolina, el episodio más reciente en una serie de problemas de calidad que podría provocar otro revés en su reputación en el mercado estadounidense.

Hasta el momento no se han atribuido accidentes a estos defectos, según Toyota. La empresa dijo que había recibido 77 quejas del extranjero, 75 de ellos procedentes de Estados Unidos y más de 140 reportes en el Japón.

Los retiros más recientes son en Japón, pero también incluyeron los modelos de lujo IS y GS Lexus, en Norteamérica, donde la automotriz número uno del mundo enfrenta los mayores obstáculos para recuperar la confianza del consumidor.

El problema en los automóviles consiste en la instalación incorrecta de un sensor que mide la presión del combustible y que podría provocar el aflojamiento de una tuerca, como resultado de una vibración en el motor por algún tiempo y también posiblemente una filtración de combustible, informó la empresa.

La instalación incorrecta del sensor afectó a 280.000 vehículos del IS y del GS, Lexis vendidos en el extranjero, 255.000 en América del Norte y 10.000 en Europa.