Londres/AP y Diario Marca. Un penal de Lionel Messi en el último minuto decidió a favor de Argentina el choque ante Portugal.

Publicitado como un duelo aparte entre Messi y Cristiano Ronaldo, las dos máximas figuras del fútbol, el Argentina-Portugal en Ginebra, Suiza, no decepcionó con un despliegue entretenido de buen balompié. Fue el primer partido entre ambas selecciones desde 1972.

Aparte de marcar el penal al minuto 90, Messi también fue quien gestó el gol de Ángel Di María a los 14’ para abrir el marcador. Cristiano hizo el gol portugués a los 21.

Considerados los dos mejores futbolistas del mundo recientemente y máximos artilleros de la actual liga española con 24 y 25 goles, respectivamente, Messi y Cristiano no defraudaron al echarse al hombro a sus respectivas selecciones.

“Volví a marcar, me siento muy contento y hay que seguir por el buen camino”, mencionó Cristiano a pesar de la derrota.

Sobre su duelo con la “Pulga” mencionó que “no hay pique con Messi, me enfrentaba con Argentina, no con él. Tanto Messi como yo jugamos bien, podíamos haber ganado, pero sufrimos un penalti al final”.

El jugador del Real Madrid se quejó del estado de la gramilla del Estadio de Ginebra, donde se disputó el cotejo.

“El campo era malísimo, una vergüenza. Un Portugal-Argentina no se puede jugar en un campo de patatas”, agregó.

Messi, que volvió a ser la figura de su equipo, esta vez con la albiceleste, se mostró muy satisfecho del triunfo. “Hemos vuelto a ganar con la Selección y el técnico puede sacar conclusiones muy positivas”, comentó.

También insistió que el encuentro no era un duelo personal con Cristiano.

“No era un Barça-Real Madrid ni un Messi contra Cristiano. No jugábamos para competir entre nosotros, sino para el bien de nuestros equipos”, concluyó.

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