Pero que no se engañe | El golazo agónico del “Caya” le da tranquilidad al técnico mexicano

Armando Alonso anotó el golazo del triunfo. Pérez vuelve a perder en el cierre, como le pasó ante la Liga y Herediano. Jeaustin la está viendo fea. C. Borbón.
Voló. Adrián De Lemos tuvo problemas con los remates de media distancia de los morados, incluyendo el tercer gol, obra de Armando Alonso.
Bloqueado. Esta fue una de las tantas opciones claras de gol que tuvo Pérez Zeledón. En esta oportunidad César Elizondo no pudo superar a la defensa morada.
Belleza. Por algo dicen que las mujeres pezeteras son las más bonitas, esta belleza se encontraba disfrutando del juego entre Pérez y el Deportivo Saprissa.

José Pablo Alfaro, enviado
jose.alfaro@aldia.co.cr

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San Isidro del General. Que Saprissa ganó, sí. Que el “Caya” anotó un golazo también es cierto, que los partidos se ganan aprovechando las opciones de gol, pues sí, es una regla fundamental del fútbol.

Pero decir que Saprissa jugó bien, convenció y llegó con claridad, eso sí no es cierto; no nos engañemos señores, este Saprissa sigue siendo un espejismo, el equipo sufrió y Juan Manuel Álvarez nunca supo aprovechar la ventaja de dos goles que tuvo en el compromiso.

Tampoco es que Pérez es el “Barca”, hay que ser claros, pero dominó el juego y tuvo mayor profundidad que la “S”.

No podemos dejar de lado los terribles errores de Rodrigo Salomón y César Elizondo, quienes regalaron los primeros dos goles de Saprissa. El primero porque realmente es una tortuga a la hora de ir a la marca y el segundo porque cree que está jugando solo.

El partido fue un cúmulo de errores de ambos lados, lo que pasa es que Saprissa fue menos deficiente que Pérez y por eso ganó.

Decía Jeaustin que “los Dioses del fútbol no han estado de nuestro lado”. Que no se engañe Campos tampoco, su equipo regaló dos goles y por eso perdió.

¿Qué rescato?, el esfuerzo de Josué y el buen ingreso de Armando Alonso, que además le dio el gol del triunfo a la “S”.

Decía Álvarez que necesita tiempo, le voy a dar el beneficio de la duda, pero por ahora Saprissa sigue siendo el mismo.