Enviado especial
Buenos Aires, Argentina. -Pitazo y locura en el estadio Monumental del club River Plate.
Fernando Muslera cayó al césped como si se hubiera desmayado, al tiempo que cerraba los puños y gritaba: “Campeones, campeones”. En otro sector de la cancha, los dos “matadores”, Diego Forlán y Luis Suárez, sonreían y se fundían en un abrazo, mientras que el “maestro” Washington Tabárez , corría de un lado a otro para festejar con sus pupilos.
La alegría, el festejo de los “Celestes” dejó claro que aparte de fútbol, Uruguay tiene unión y por eso la Copa quedó en las mejores manos. ¡Salud campeones!.
Volvieron otra vez
“Volveremos, volveremos, volveremos otra vez. Volveremos a ser campeones, como la primera vez”, cantó la afición uruguaya, que hacía retumbar el Monumental y parecía que en el rectángulo, el cántico llegó a los oídos de Luis Suárez, quien a los once minutos le dijo a su gente: tomen y celebren. Luis abrió la cuenta y apagó cualquier ilusión de los paraguayos, quienes en las gradas entonaban el “sí se puede, sí se puede”, pero esta vez no pudieron.
Forlán no dejó dudas
Y cómo iban a poder, si los guaraníes jugaron a cuidarse, a defenderse, casi no propusieron, seguro pensaban en los penales, pero no, el equipo de los empates, el que no ganó un solo encuentro, no iba a tener tanta suerte esta vez.
Manos de Villar no fueron suficientes
Víctor Cordero, futbolista ejemplar
González pinta como el heredero de Marín
“Andrey se merece el reconocimiento”
“El tobillo se hizo famoso en el pelotón”
De la crítica a lo más alto del ciclismo
“El Tour son mis Juegos Olímpicos”
Competencia llena de sorpresas
Álvaro Saborío llegó a 201 goles
Rónald González espió a España
XXV edición de la Clásica Santaneña
Llega rival del “Indio” Barboza
Alexis Sánchez recibido en el Barcelona
Phelps tuvo que aceptar el bronce
Lewis Hamilton se mete en la pelea
A Stoner nadie lo detiene y sigue líder