La promesa de $10 mil (¢5,1 millones) por cada embarque de droga concretado seduce a muchos “burros”, quienes terminan en prisión o en ocasiones muertos sin saber que el pago es “a crédito y en pequeñas cuotas”, aseguró un experto de la Policía de Control de Drogas (PCD).
Eso deja a los transportistas atrapados en un círculo, pues muchos de ellos aceptan llevar otros cargamentos con la esperanza de recuperar el dinero adeudado.
En lo que va del año suman 24 los“ burros” arrestados en el aeropuerto internacional Juan Santamaría, entre ellos cinco ticos e igual número de guatemaltecos. También han caído canadienses, españoles, un guyanés, un lituano, un inglés, dos rumanos, y un portugués.
El martes pasado fue arrestada en esa terminal aérea una pareja integrada por un hombre de apellido Jammar, de 22 años y una mujer de apellido Navarro, de 21 años. Pretendían abordar un vuelo hacia Panamá.
Seguido abordarían un avión con destino final a Amsterdam, en Holanda, donde tenían previsto entregar los 2,3 kilos de cocaína que iba diluida en cuatro latas de bebida energética.
Las organizaciones narcotraficantes son lideradas la mayoría por colombianos y mexicanos, quienes reclutan tanto a nacionales o extranjeros radicados en el país, citó el experto.
Al total de detenidos se les ha incautado de 38. 327 gramos de cocaína y 1.238 gramos de heroína.
Ambición gana partida a los ticos
La ambición al dinero para la compra de vehículos y mantener un nuevo estatus tienta a más costarricenses cada día.
Pese a que la promesa es el pago de $ 10 mil, la PCD aseguró que en realidad los narcos les pagan unos $1.000 (¢510 mil), dinero que usan para gastos, más el pasaje.
A su regreso al país, en ocasiones les pagan $1.000 más, pero no cuentan con que van a ser buscados para que lleven otro embarque. Los narcos suelen manifestar a los burros que aún no han recibido el pago por la primer carga, por lo que deben de esperar unos días.
“Los transportistas suelen hacer sumas en su mente de que tiene un montón de dinero, mismo que nunca llega”, citó el experto.
También en ocasiones, cuando son arrestados en el extranjero, se topan con la barrera del idioma, lo que es muy frustrante.
“Los ‘burros’ son desechables. Los reclutan en bares y salones. Han usado licores, champú, tablas de surf, tanques de oxígeno, pelucas, brasieres y hasta en latas de frijoles. Otros ingieren óvulos que luego deben expulsar del cuerpo”, aseguró el policía.
Para sacar los óvulos, cuyo peso ronda los 10 gramos de contenido, suelen tomar laxantes. Además, también ingieren pastillas que retarda el sistema digestivo con el fin de soportar las largas horas de viaje en avión. Esa práctica ha cobrado vidas.
De interés
Varios años encerrado
La pena por el delito de tráfico internacional de drogas ronda entre los 8 y los 20 años de prisión, en caso de ser hallado culpable.
De muchas formas
En ocasiones la droga la intentan sacar en equipajes, adheridas al cuerpo (extracorporal), a lo interno del estómago o en un orificio corporal como la vágina.
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