Los dirigentes de las organizaciones de educadores solicitaron ayer al ministro del ramo, Leonardo Garnier, que se abra un diálogo para desarrollar una propuesta integral para todos los problemas que los aquejan.

“Es una propuesta que no se consultó; no tiene ningún sustento investigativo. Es una ocurrencia más de las que el ministro Garnier quiere impulsar. Pero no estamos dispuestos a más parches”, señaló la presidenta de la Asociación de Profesores de Segunda Enseñanza (APSE), Mélida Cedeño.

Para el presidente de la Asociación Nacional de Educadores (ANDE), Alexander Ovares, es un irrespeto que el ministro haya lanzado una propuesta sin antes conocer la opinión de los docentes.

“Esta propuesta no aporta nada a la calidad de la educación”, aseveró.

Además, al dirigente le preocupa el efecto económico que podría tener la trimestralización para los padres de familia, quienes tendrían que invertir en útiles y uniformes desde enero.

Argumentó que la propuesta no incrementaría el descanso de los estudiantes, ya que tendrían que estudiar durante los 15 días entre cada período para el examen que se les aplicaría al inicio de los trimestres.