Con frecuencia me preguntan aficionados y periodistas sobre la clave para haber logrado el crecimiento y profesionalismo como futbolista. Sin dudar respondo: la actitud, la confianza y el trabajo.
Actitud, porque no desmayé cuando el entrenador del equipo infantil de Liga Deportiva Alajuelense, no me ponía a jugar porque me decía que no tenía condiciones.
Actitud, porque supe seguir cuando en el año 2004, el club PSV Eindhoven de Holanda no me contrató, luego de hacer una prueba de un mes con su equipo filial el Heracles, porque dijo que podía pagar mucho menos dinero por un jugador con mis condiciones.
Además, pude superar el golpe anímico que me provocó quedar fuera de la lista de convocados de la Selección Nacional, para el Mundial de Alemania.
Respondo que la confianza ha sido fundamental porque siempre he creído en mi talento y en mi capacidad, a pesar de la adversidad.
Fue gracias a esa actitud y confianza que los frutos llegaron a mitad del año 2006, al cumplir mi sueño de salir al fútbol internacional, haciendo la primera escala en el Club KAA GENT de Bélgica, el cual no era el destino favorito, pero sí la oportunidad para abrir la puerta de Europa.
Para mala fortuna, el entrenador no creía en mí, a veces me mandaba a la gradería, en otro juego iba a la banca pero sin jugar, y en otras ocasiones me ponía unos minutos. Por segunda vez en mi corta carrera un entrenador me desmeritaba.
Me aferré a la confianza y no bajé las cargas de trabajo en cada entrenamiento, lo que fue vital porque me permitió estar a punto cuando llegó otro entrenador al Gent para la campaña 2007-2008, quien sí creyó en mí y pude anotar 14 goles. Al año siguiente llegó a este club de Bélgica el entrenador Michel Preud´homme -actualmente en el Twente- y también confió en mis condiciones, me dio la capitanía y logré 15 goles en la temporada.
Se dio la contratación del FC Twente de Holanda en el 2009 y en dos años que tengo vestido de rojo, he vivido en este club grandes triunfos y metas personales y grupales, me hice un nombre a punta de esfuerzo y goles.
Ahora lanzo la vista al frente en busca de un nuevo horizonte futbolístico, al cual llegaré en el momento oportuno; eso sí, donde quiera que vaya, sea hoy o mañana, llevaré conmigo los tres pilares de mi carrera: la actitud, la confianza y el trabajo, aspectos que me ayudan a llevar esa carrera de una manera profesional.
