Noticias del día
Martes 8 de noviembre de 2011, Costa Rica

Apenas 409 conductores pagaron multas

Suspensión de cámaras deja pérdidas a Racsa

Gloriana Corrales

gloriana.corrales@nacion.com

La suspensión de las cámaras inteligentes de vigilancia en carretera dejó a Radiográfica Costarricense (Racsa) como el gran perdedor del negocio.

Debido a la suspensión temporal de las cámaras, en los próximos seis meses solo podría recuperar ¢3,6 millones de los ¢35 millones que invirtió.

Según lo pactado con el Consejo de Seguridad Vial (Cosevi), Racsa recibiría el 15 por ciento del monto total de las infracciones cobradas, esto a cambio de la ejecución del sistema de vigilancia.

La directora del Cosevi, Silvia Bolaños, insiste en que luego de medio año retomarán el proyecto y se volverá a habilitar el cobro de las multas.

Sin embargo, aún está pendiente que la Sala Constitucional dicte resolución acerca de la legalidad del sistema y de la proporcionalidad del monto de las infracciones.

Por este motivo, está en duda si el Cosevi podrá realizar los cobros respectivos y si Racsa percibirá nuevas ganancias.

El Cosevi no tuvo que invertir recursos en la implementación del sistema, pero pretendía utilizar los fondos recaudados para construir puentes peatonales y demarcar carreteras.

Con números rojos

Bolaños comentó que antes de suspender las cámaras y el cobro de infracciones, solo 409 conductores de los 19 mil sancionados se apersonaron a pagar. De este modo, se recaudaron ¢97 millones.

Racsa informó que, a la fecha, invirtió un total de ¢35 millones, entre la publicación de dos listas de multados –¢25 millones – y otros costos menores.

Esta empresa estatal no invirtió en la compra de las cámaras. Para ello subcontrató al consorcio tico-brasileño Servicios de Gestión en Seguridad Vial Engebras.

El contrato establecía que en el momento de la entrada en funcionamiento de las cámaras, el 75 por ciento de los ingresos los recibiría la compañía privada y Racsa se quedaría con un 25 por ciento.

Por lo tanto, de los ¢97 millones del cobro de las multas, el consorcio se quedaría con ¢11 millones.

El representante de la firma, José Navarro, omitió referirse a montos. No obstante, explicó que ya habían comprado otras 20 cámaras para 10 sitios que, por ahora, quedarán embodegadas.