Domingo 1 de abril de 2012, Costa Rica

Miss Costa Rica

Johanna Solano: “no tengo rey, soy princesa”

Isaac Lobo

ilobo@aldia.co.cr

No se acuerda del divorcio de sus padres, era demasiado pequeña, en su mente como motor motivacional, solo tiene a su madre como ejemplo, quien sacó adelante a tres hijos.

Nunca le faltó nada, pero tampoco le sobró, será por eso que explicó que viviría feliz comiendo tan solo arroz y frijoles. Su hambre está en otro lado: Johanna Solano se devora el mundo día a día en todo lo que hace.

Su primera “víctima” fue Miss Universo, donde no se dejó apantallar por potencias como Venezuela, Colombia y Puerto Rico.

Ser una reina en todos los sentidos fue un sueño que a sus 21 años de edad ha vuelto una realidad y por el cual se ha comprometido a tal grado que ahora le pasa su conocimiento a las aspirantes a Miss Costa Rica 2012.

Todavía no se acomoda al lado feo de ser una figura pública: que se metan con su vida privada. Aun así, conscientes de eso, Al Día lo hizo una vez más y ella lo aceptó con gusto.

¿Cómo le cambio la vida ser Miss Costa Rica?

He aprendido muchas cosas, he crecido mucho como mujer y como profesional, pero en sí la esencia sigue siendo la misma de aquella chica que llegó a inscribirse hace un año. Soy la misma soñadora, risueña, la misma positiva de siempre. Obviamente ahora soy una figura pública.

¿Qué situaciones pasan ahora que antes no sucedían?

Si voy a un centro comercial, a comer a un restaurante se fijan con quien ando, se quieren tomar fotos. No me molesta, es muy halagador. Pero también tiene su lado negativo.

¿Cuál es?

La vida personal, no es tan personal. Aunque trate de tener un bajo perfil y ser reservada con mi vida, siempre existen medios que están interesados. Es imposible que no sepan de mi intimidad. Al ser uno Miss Costa Rica hay que cuidarse el triple.

¿Cómo se cuida?

No he permitido que el título cambie mi forma de vivir, porque no lo disfrutaría. No he dejado de ir a lugares. Siempre he sido muy cuidadosa, no es ahora que escojo bien las amistades.

¿No puede salir sin maquillaje a la calle?

Siempre he sido coqueta, así que cuando salgo me arreglo, además siento que me veo bien sin este.

¿Hay presión para verse siempre linda?

Físicamente es lo que menos presión trae. Hacer ejercicio se hace una rutina. Lo que trae presión y es desgastante es cuidarse emocionalmente. A veces no ando de buen humor, por alguna mala noticia y salir y dar la cara y verse sonriente, cuesta.

¿Qué labor ha hecho?

He estado en muchas actividades. Para citar algunas, participé en el Mundialito de radio Columbia en beneficio de la Fundación Debra. A esta misma fue a la cual le doné el reto de los toros en diciembre. Hice una recolecta de regalos en Navidad para los pequeños del Hospital de Niños. En fin, de el 80 por ciento de los eventos que he ido son de caridad.

¿Cómo se ve en el futuro?

Lo que son los concursos de belleza ya mi ciclo terminó. Me gustaría transmitir mi conocimiento a futuras reinas con alguna agencia o institución especializada. Quiero formar parte de canal 7 que me ha dado tanto, pues he recibido un apoyo de amistad y se han formado lazos muy fuertes entre nosotros. Mi interés es formarme como periodista y ser presentadora de televisión.

Usted se formó en pasarela, maquillaje y dicción, pero ¿quién la preparó para ser una figura pública?

Siempre que he aprendido fue a palos. Nadie me preparó nunca para eso. La vida me dio cachetadas, ser miss no es todo bonito.

¿Qué es lo más incómodo que le pasó con la prensa?

En ese momento en el cual terminé con mi novio. Yo los respeto, pero fue esa invasión exagerada a la privacidad que sentí, que no era necesaria.

¿Qué les dice a las candidatas de Miss Costa Rica?

Que saquen la fiera que tienen por dentro, que les demuestren a la familia y a ellas mismas que con trabajo todo se logra, cualquier cosa. Paulo Coelho tiene una frase que me encanta: “Cuando una persona desea realmente algo, todo el mundo conspira para que pueda realizarlo”.

¿Qué prejuicios tiene la gente hacia las reinas de belleza?

Que somos tontas, que no trabajamos, que comemos solo lechuga y que estamos felices y de buen humor todo el tiempo.

Por cierto, ¿usted de qué vive? ¿trabaja?

(Risas) Me he manejado por contratos, ahora con Sedal, en eventos, de alguna marca que requiera de mi presencia, como ahora que viajé a Francia. Tampoco soy una persona cara para vivir, soy muy sencilla en todo sentido.

Usted que vive sola, ¿con qué platillo vive feliz?

Solo con arroz y frijoles. Podría comer el resto de mi vida y me siento muy identificada con este.

¿Qué hizo en Francia?

Son fotos de modo para una editorial de revista, son clientes que conocía. Me fui por una semana. Fueron cuatro días de trabajo y el resto de días fue para pasear. Ellos ya saben que yo estoy cansada, entonces son fotos normales.

¿Ser reina de belleza es un buen negocio?

Ni tanto. Pues si se sabe manejar bien es bueno. Al principio se requiere mucha inversión en vestuario y maquillaje. Usualmente no se puede trabajar porque hay que estar disponibles todo el día.

¿No se puede trabajar?

Es que precisamente la gente se pregunta de dónde sale ese dinero para comprar tantas cosas.

¿El patrocinio que tiene usted con Calzado del Barco le da dinero?

No, sólo me dan zapatos, pero eso es un ahorro grandísimo. Me dejó una de las amistades más grandes que he tenido.

Ahora que está sin novio. ¿Le llueven enamorados?

Vieras que soy muy despistada y no me doy cuenta, soy muy inocente en esa parte, solo un par de mensajes muy directos que me enviaron al Facebook, pero por lo demás no ando buscando novio.

¿Cómo está su corazón?

Está llenísimo de amor, por la gente que me rodea. Soy una reina sin rey, por eso puedo decir que soy una princesa.

¿Requisitos para el amor?

Con quien sienta chispa, que es esa química especial. Debe de tener excelente sentido del humor, pero que no sea payaso. No tengo un prototipo porque he salido con altos, bajos, flacos y gorditos.

¿Es difícil tener a su mamá en Panamá?

Muy difícil, trato en la medida de lo posible visitarla una vez cada dos meses. Ahora no lo hago desde Navidad. Ella se fue a ese país cuando a su esposo el dieron un trabajo muy bueno allá.

¿Es independiente?

Siempre lo he sido, desde chiquitilla. La soledad no me deprime, puedo ir al cine sola y a cenar. Hace dos años vivo sola.

¿Cómo fue su infancia?

Fue fácil porque mi mamá se encargó de que así fuera. Para ella si fue muy difícil porque nos crió sola. Nos dio la mejor educación. Me enseñó mucho, parte de lo que soy como mujer es por ella.