Opinión

JulioRodríguez

Periodista

Concluidos, el domingo pasado, los partidos entre la Liga y el Saprissa, el del Herediano y el Cartaginés, me disponía a redactar esta columna sobre un tema que, a estas horas, del campeonato de verano parece justo y necesario. Me refiero al esfuerzo de los equipos para imprimirle mayor calidad al fútbol tico.

La dura competencia entre un grupo de equipos en los escalones medios de la tabla podría ser obra de la casualidad o de la mediocridad, pero no lo es. Quienes han seguido el curso de los partidos saben que las distancias se han acortado, que se está jugando mejor, en el sentido técnico, en el esfuerzo colectivo y en la aplicación de los principios básicos del fútbol. Aún más: se han visto jugadas de buena factura. Pareciera, que contamos con mejores directores técnicos.

Desde este punto de vista y sin ánimo de hacer comparaciones estrafalarias, como comparar nuestro fútbol con el que se practica en Europa o América del Sur, conviene leer la columna del periodista Jorge Barraza, intitulada “¡Aleluya!, el fin de la especulación”. “¿Por qué se está jugando mejor”, se pregunta el autor. Y responde: “La victoria es el único negocio redituable. Ya casi no existe la especulación. Por ello, agrega, estamos viendo gran fútbol en los últimos tiempos”. Luego, el autor comenta, con su sabroso estilo, las ocho razones, según él, de este cambio. Hay que leerlas.

El deporte, aspira a lo mejor. No a la derrota o al empate, sino al perfeccionamiento del ser humano. Es un reto maravilloso, que va de la mano de la libertad y de la voluntad, regida por la verdad. Aún más, la misma derrota debe convertirse, gracias al análisis y la rectificación, en factor de cambio. El fútbol, siempre nos enseña. Hay que gozarlo y aprovecharlo.