El cantante mexicano Luis Miguel ya adelantó parte de lo que requiere en su selecto y extravagante camerino, para el concierto que ofrecerá en el estadio Ricardo Saprissa el 4 de marzo.
“Pidió varias botellas de agua de las Islas Fiji, también una marca hidratante que tuvimos que conseguir del exterior, 12 rosas blancas recién cortadas sin espinas para el escenario y velas en el camerino con aroma a vainilla”, explicó Ernesto Arceyut, de Arceyut Producciones.
Además viene con una política de reciclaje, pues solicitó que toda la comida que se venda en el estadio se sirva en envases que se puedan reciclar y no quiere desperdicios de comida en su camerino.
El “Sol de México” llegará un día antes, el 3 en vuelo privado desde Estados Unidos y fuertemente custodiado.
Con él viajan cinco guardaespaldas y aquí se le sumarán ocho más, porque el artista pidió cuidar su tranquilidad y privacidad durante sus días en el país.
Según supo Al Día, existe una probabilidad de que la voz de “La incondicional” venga acompañado por su novia, según algunas solicitudes que hizo en su hospedaje que levantan sospechas.
El azteca llegará con 50 personas del “staff”, ocho de ellos músicos y contará con uno de cambio de vestuario rápido cerca de tarima. Como ya se anunció, el artista se tomará unos días de descanso y se irá del país hasta el 6, cuando cante en Panamá. Él visitará las playas de Guanacaste y no se sabe si aterrizará en Liberia o en el aeropuerto de Alajuela.
Arceyut finalmente dijo que la venta va muy avanzada. “Ya se han vendido 12 mil espacios y aún faltan dos semanas para el espectáculo”, concluyó.
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