DONETSK, Ucrania/ AP - Los problemas internos en la selección francesa ya fueron superados y ahora los futbolistas están concentrados en vencer a España en los cuartos de final de la Eurocopa, afirmó ayer el entrenador asistente Alain Boghossian.
Dos años después del fracaso del Mundial, la selección gala tuvo otro incidente de disputas y discusiones en el seno del plantel luego de la derrota del martes 2-0 ante Suecia en el cierre de la etapa de grupos, sin embargo, el equipo informó que el grupo ya alivianó todas las tensiones y disgustos.
“El fuego se extinguió. No hay fisuras. Todos dijeron lo que tenían que decir”, comentó Boghossian antes del partido de mañana contra los campeones mundiales y europeos. “Todos conversamos en el almuerzo y las cosas se calmaron. Luego tuvimos una pequeña reunión tras la cena”, dijo.
La prensa francesa reportó el miércoles sobre altercados entre jugadores y el cuerpo técnico, pero Boghossian aseguró que la situación no se parece a la crisis que hubo hace dos años en Sudáfrica, donde los futbolistas boicotearon un entrenamiento.
“No hay comparación. Estas cosas suceden, no podemos taparnos los ojos. La tensión es normal cuando pierdes un juego. Si todos estuviesen sonrientes después de una derrota, entonces nosotros (el cuerpo técnico) nos hubiésemos enojado aún más”, expresó.
Tras el partido jugado en Kiev, el jugador Ben Arfa retó al técnico Laurent Blanc para que lo enviara a casa. Ambos mantuvieron una discusión subida de tono en la que el volante le reclamó por haberlo sacado del campo.
Blanc reprobó a Arfa que estuviera jugando con su teléfono celular y le sugirió que llamara a su familia más tarde. Entonces, el jugador, sustituido al 60’, le dijo al entrenador que en la cancha habíanjugadores “mucho peores”.
“Hubo artillería pesada en el vestuario. Se despertaron viejos fantasmas”, admitió el galo Florent Malouda, uno de los pocos supervivientes de los conflictivos días en la Copa de Sudáfrica.
“La falta de actitud ante Suecia no puede volver a suceder el sábado con la campeona de Europa y del mundo. Quería acabar primero para jugar contra Italia. Sin faltar el respeto a Italia, habría sido más asequible”, admitió Blanc.
