Cuando el taekwondista nacional, Héiner Oviedo sale del país, lo primero que piensa es en traerle ropa a los perritos de la casa, Sussy y Chino.
Estas mascotas son dos Chihuahuas, propiedad de la hermana del deportista, pero que él los quiere como sobrinos.
“Los chineo. Les compro ropa. Me esperan con ladridos. Aunque a mí me gustan los perros grandes, ellos son unos peleones como yo”, cuenta el taekwondista.
Según Oviedo estos perritos son tan peleones como él. “Hasta en eso salieron a mí”, añade.
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