Debido a que en el momento de su detención a Alejandro Jiménez se le atribuía sólo falsedad ideológica, el juez colombiano de Bahía Solano decidió dejarlo en libertad.

Una hora después y con la confirmación de Costa Rica (mediante huellas) de que se trataba de “Palidejo”, se ordenó un nuevo operativo para recapturarlo, acción que se logró en minutos.

Las autoridades colombianas confirmaron los nexos que “Palidejo” tenía con la banda de los hermanos “Comba”.

Al parecer estos, con dinero del cartel de Sinaloa, le tramitaron cédula y pasaporte en Santa Marta, Colombia, a nombre de Carlos Emilio Cardona Marín, supuesto habitante de Caldas.

La Policía Antinarcóticos señaló que “Los Comba” garantizarían al cartel de Sinaloa que Jiménez se movería sin ningún contratiempo.

A Jiménez le otorgaron ayer, en la prisión de Fraijanes I, el número 143, así como un uniforme blanco. Permanece en un sitio aislado.

Jiménez se expone a una pena de 90 años si le aplican los topes máximos por asesinato, asociación ilícita, encubrimiento propio y tentativa de asesinato.

Así lo establece el Código Penal de Guatemala.